Es uno de los colores que más glamour pueden aportar a tu casa. Brillante, esplendoroso y rebosante de luz. Hoy te damos algunos consejos para que triunfes a la hora de decorar con dorado y lo incorpores con acierto a las diferentes estancias. Será una forma genial de aportar un valor extra al interiorismo.
Una de las tendencias que han regresado para quedarse es la de decorar con dorado. O quizás es que nunca se ha dejado de utilizar este brillante color para enriquecer un ambiente y dotarlo de elegancia.
El caso es que incorporar a la decoración uno o más elementos dorados continúa estando de la más rabiosa actualidad. La clave está en hacerlo bien para que el resultado sea espectacular. Hoy te contamos cuáles son los secretos para conseguirlo.
Cómo decorar con dorado y acertar
Si la decoración de tu salón te gusta pero notas que le falta algo, puede que te ayude leer el siguiente artículo. Hay veces en que un ambiente, a pesar de estar bien decorado y ser de nuestro agrado, adolece de la carencia de un toque especial. No sabemos muy bien qué es lo que le falta, pero no tiene brillo ni glamour.
En estos casos, una buena pieza dorada se convertirá en tu mejor aliado para imprimir a ese salón la magia y el punto chic que le falta. Y es que decorar con dorado es una estupenda idea que todos podemos hacer nuestra.
Claro que el éxito o el fracaso de la iniciativa va a depender de cómo lo llevemos a cabo. Qué piezas vamos a elegir, cuántas y dónde las vamos a colocar son aspectos a considerar. Aquí tienes algunos consejos para que te resulte más fácil.
La moderación, una cuestión fundamental
Si, como yo, eres de los que se apasionan en casa por los toques de glamour como los que aportan las piezas doradas, ten mucho cuidado. Puedes empezar colocando una lámpara de sobremesa de este magnífico color y terminar llenando el espacio con objetos de metal dorado. Y no se trata de que para entrar a tu casa sea necesario ponerse gafas de sol, ¿verdad?
Decorar con dorado exige, sí o sí, un punto de moderación. Si bien ocurre lo mismo con la mayoría de las corrientes y tendencias deco, en el caso del dorado esto se hace todavía más evidente. Es por el matiz brillante del color, que puede abigarrar el espacio si se utiliza demasiado.
Por eso, y ante este peligro, conviene razonar, ir poco a poco y no llenarlo todo de elementos de este color. Así conseguiremos ser comedidos y lograr el efecto buscado: una elegancia infinita pero sin dejar al margen la serenidad.
La clave para no pasarse al decorar con dorado es elegir elementos de pequeño tamaño, en especial si tu salón o tu dormitorio no son muy grandes. Poner una lámpara, un espejo o un mueble auxiliar es buena idea. Además, empezando con toques muy sutiles puedes ir aumentando hasta lo que creas conveniente.
Apto para cualquier habitación
Puede que te parezca que el salón o el dormitorio son los únicos espacios en los que se puede decorar con dorado. Nada más alejado de la realidad. Cualquier habitación de la casa se verá sorprendentemente enriquecida con una buena pieza dorada.
Por ejemplo, un toque dorado en el cuarto de baño le aportará un matiz muy decorativo. A este tipo de espacios les viene de perlas un plus de elegancia. Suelen ser sencillos y un tanto impersonales.
También el recibidor es un emplazamiento perfecto para poner una pieza dorada como una consola o una pequeña mesa. Crearás un efecto original que causará muy buena impresión en el visitante. Ya sabes, el recibidor es la carta de presentación de tu casa.
¿Muebles, lámparas, espejos, objetos decorativos?
Existen diversas formas de introducir el dorado en un ambiente, en lo que a la decoración se refiere. Si la habitación es amplia y luminosa puedes optar por poner algún mueble dorado. Los que combinan metal dorado y cristal me parecen preciosos, muy al estilo mid-century modern que tantas pasiones levanta.
Una lámpara, de techo o de sobremesa, y un espejo pueden ser también elementos clave a la hora de decorar con dorado. El éxito reside en saber mezclar este tipo de elementos. Apuesta por otros materiales que equilibren el resultado final. La madera y otros materiales naturales, como los textiles sencillos, te servirán para contrarrestar el efecto teatral del dorado.
Pero si lo tuyo es el oropel y quieres poner varias piezas doradas en tu salón, una buena idea es combinar diferentes acabados. Es decir, escoge algunas en dorado brillante y otras en mate u oro envejecido. Le darás más dinamismo a la decoración.
Sea como sea, decorar con dorado es la forma perfecta para poner brillo y glamour a un espacio aburrido. ¿Te animas a intentarlo?
Puedes leer la entrada original y completa en de la revista online Decoración 2.0.