Bien utilizados, los colores pastel ofrecen un amplio abanico estilístico pues son relajantes, frescos y versátiles. Esta paleta cromática se puede integrar a una amplia variedad de accesorios decorativos y acabados, como la pintura, el papel pintado, revestimientos, etc. No se puede dejar de mencionar tampoco a los muebles, que representan otro recurso para incorporar la tonalidad pastel.
¿Quién dice que el rosa o el azul pastel están pasados de moda o reservados exclusivamente para las habitaciones de los niños?. Con el pastel se añade un poco de romanticismo, de bienestar, de ligereza, y de suavidad al interior de la casa.
* Con una bonita gama armónica, el resultado puede ser espectacular. Si se combinan con blanco, los colores pastel aportan luz a la habitación. En los ambientes en los que prefieres recrear una atmósfera de vitalidad y de optimismo, no hay nada mejor que un color pastel alternativo o complementario.
* Cuando lo que se busca una atmósfera mucho más tranquila, se pueden utilizar diferentes matices del mismo color.
* Los colores pastel combinados con tonos cálidos de la madera están de moda. Además cada vez son los diseñadores influenciados por el estilo escandinavo, ponen el acento en el mobiliario, la decoración y los accesorios con esa mezcla de madera-pastel.
* Los colores pastel pueden tener un efecto estimulante. Un verde delicado se adapta estupendamente a los muebles de color blanco, a un despacho clásico o a los armarios. El rosa pastel es un color calmante y podemos integrarlo perfectamente dentro de un dormitorio.
* Para los menos "arriegados" la opción es utilizar los tonos pastel exclusivamente en complementos decorativos, cojines, mantas, plaids, jarrones e incluso flores o alfombras. Es la opción ideal para el que desea conseguir una estética pastel sin excesos, o para aquellos que solo desean este decolook en los meses más cálidos pero no en los fríos.
Así pues, si te animas a darle vida a tus interiores, crear tu propia atmósfera y renovarlos, sólo tienes que emplear como base un mobiliario y paredes con tonos neutros (grises, blancos, maderas o negros), y añadirles estos tonos pastel en la gama que más te guste, cambiando así el look habitual en cuestión de minutos y con un presupuesto más que aceptable.¿te animas?
¡Feliz día a todos!
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