Lo más conveniente es distribuir la luz de forma estratégica para que todos los elementos del comedor se distingan perfectamente, jugando además con la luz natural que entra por las ventanas. Para ello, lo mejor es buscar cuál es el tipo de lámpara que más se ajuste a cada rincón del comedor en base a las distintas tendencias que existen en el mercado. Por ejemplo, podéis echad un vistazo a las lámparas comedor de Lampara, una tienda online de lámparas e iluminación con más de 10 años de trayectoria profesional. De origen alemán, esta empresa se ha constituido con el tiempo en una de las de mayor éxito en toda Europa.
El epicentro del comedor es, sin lugar a dudas, la mesa por lo que se necesita una luz directa sobre esta que ilumine completamente toda la superficie. Las lámparas colgantes son la mejor opción es estos casos, pues aportan un toque elegante y original a esta zona de la casa. Sin embargo, es necesario que estas se coloquen a la altura adecuada para que no resulten molestan cuando se está bajo su luz ni se produzcan choques contra ellas. Por regla general, lo ideal es que las lámparas de salón y comedor queden a 80-100 centímetros. Aún así, hoy en día existen lámparas regulables que permiten reajustarse para iluminar más o menos estancia.
Pero las lámparas colgantes no son la única opción de luces que pueden utilizarse en la zona del comedor. La iluminación empotrada en el techo es una alternativa muy adecuada para los que buscan un estilo más minimalista y que quieran aprovechar al máximo el espacio de su hogar. Se necesitan al menos un par, pero sí es cierto que ofrecen una iluminación uniforme por todo el comedor. Además, en las zonas de almacenaje, los apliques se convierten en los mejores aliados para iluminar estos pequeños espacios, al igual que ocurre con las lámparas de mesa. Estas últimas son perfectas para mesitas auxiliares dispuestas en los rincones de la estancia.
Por supuesto, aunque el diseño de las lámparas es imprescindible para que el comedor y el salón luzcan impecables, lo cierto es que la iluminación que utilices tendrá un efecto en el bolsillo. Cada vez son más los que se decantan por las luces led en todo tipo de estancias. De hecho, muchas lámparas cocina y de salón ya incorporan una bombilla de este tipo. Entre sus características destaca su durabilidad y eficiencia energética, ya que cuenta con una mayor vida útil y consume hasta un 85% menos de energía. Apostar por lámparas led es también contribuir con el medio ambiente, pues no se fabrican con componentes tóxicos para este, además de necesitar un mínimo mantenimiento.
Fuente: este post proviene de The Beautiful Project, donde puedes consultar el contenido original.
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