Por fin es viernes, y esta semana tenía especialmente ganas de que llegara para poder mostraros este trabajo, del cual estoy muy contenta del resultado.
Abajo podemos ver cuál era el aspecto original del baúl. Según se observa, le habían aplicado una capa de barniz para oscurecerlo, muy mal aplicada, por cierto. En la foto inferior se aprecian las iregularidades
Contaba con varios desperfectos que había que reparar: una pata rota, algunos arañazos y erosiones, la tapa se encontraba suelta, sin bisagras y medio rota.
En la imagen superior se aprecian (en la pata) el barniz aplicado, el acabado de la superficie sobre la que se aplicó, la madera natural en la cara inferior del mueble y los restos de cola usada para pegar la pata rota
Además, algo muy curioso; a las patas se les había puesto ruedas. Desde luego que así resultaba mucho más práctico desplazarlo y menos pesado, pero estéticamente era un horror; había que quitarlas.
Lo primero que había que hacer era eliminar la capa de barniz con decapante. Se puede observar como actúa el producto; levanta fácilmente el barniz que posteriormente tiene que ser eliminado con una espátula
En la foto superior se ve como era inicialmente el acabado.
Y después lijar dejando la madera al natural. En la imagen inferior ya se ha llevado a cabo ese paso y se muestra el mueble con la madera limpia y algunas zonas en las que ya he aplicado el sellante; sólo aquellas que se iban a pintar, porque después de ver lo bonita que tiene la beta la madera de pino, incluidos nudos también, decidí teñir el baúl en sus cuatro caras exteriores, y pintar con pintura al agua aquellas zonas más feas o deterioradas, como el interior, la base, las patas y la tapa.
¡Vaya cambio!
Elegí este color porque tengo una silla recuperada y renovada pintada en el mismo tono: una silla modelo Windsor, (que puede que recordéis, si no, aquí la podéis ver) para que fueran a juego.
Para que quedara bien la pintura tuve que dar cuatro capas…
Sin embargo las caras a teñir sólo necesitaron una mano. El tinte que utilicé fue la propia pintura en proporción cinco partes de pintura por una de agua.
Utilicé cinta de carrocero para separar las distintas zonas.
Para finalizar le dí un par de manos de barniz para proteger el mueble del uso y este es el resultado final
Y aquí algunos detalles
La verdad es que me ha gustado como ha quedado, espero que a vosotros también…
¡¡¡Feliz Fin de Semana!!!