Los que conocéis la pintura a la tiza, ya sabéis lo versátil que es. Personalmente, la he probado en muchas superficies: plástico, rafia, madera, cristal, tela... y casi siempre con resultados perfectos.
Para este DIY, he probado a utilizarla sobre un jarapa básica y el resultado es excelente. Tardé más en colocar la cinta de carrocero que en pintarla. Se adhiere perfectamente, pero a la vez no traspasa a la parte posterior. Está claro que nunca me atrevería a meterla en la lavadora, porque al ser una pintura al agua, sería imposible que sobreviviese... pero puedes colocarla en un lugar que no sea de paso o darle otros usos. Me encanta como quedan sobre la pared para simular un tapiz o incluso para hacer las veces de cabecero.
En las imágenes que ilustran este post, podéis ver como he recuperado también con esta pintura, una vieja silla que me dio mi padre (tenéis el antes en mi Instagram) utilizando un par de colores y la verdad es que no parece la misma. Estaba pintada en verde, solo tuve que lijar un poco para quitar algunos trozos descascarillados que tenía y aplicar la pintura. Acabé la silla con cera incolora, siempre hay que hacerlo con este tipo de pintura para protegerla.
Os animo a todos a utilizarla, seguro que os conquistará, es fácil de aplicar, no huele, se limpia con agua, los colores son preciosos... y totalmente recomendable para inexpertos.
Si os apetece experimentar con esta pintura sobre textil, podéis inscribiros en el Taller "Transforma tu japara" que impartiré el viernes 19 de mayo a las 18.00 en Leroy Merlín Toledo, allí os hablaré un poquito más sobre ella. Podéis hacerlo en la Comunidad de Leroy Merlín, a través del Blog de la tienda de Toledo. ¿Qué mejor plan para una tarde de viernes que pasarla de una forma tan creativa? ¿Te vienes?.
