Chakl Paint, o pintura de pizarra, tiene un montón de utilidades. No se trata solo de poder escribir con tiza sobre nuestros muebles o sobre cualquier superficie. Sino que podemos cambiar el aspecto de cualquier mueble, lampara.... (da igual si es madera o metal) sin tener que lijar y dar una capa de imprimación. Muchos os tira para atrás eso de lijar así que con esta pintura ya no tendríais excusas. Pues sin estos pasos que teníamos que dar antes imaginaros las posibilidades que tenemos a la hora de hacer cualquier proyecto en casa. Pero como todas las cosas, el Chalk Paint tiene un problema, y es que es caro.
En La Buhardilla no hemos probado este tipo de pintura todavía, aunque si la conocemos y sabemos el resultado que puede dar. A mi personalmente me surgen algunas dudas puesto que la capa de imprimación siempre es recomendable a la hora de pintar para que el color se fije correctamente y adquiera el tono que queremos. Por otro lado está el paso del tiempo que no sabemos muy bien como va a comportarse sobre las cosas que pintemos con esta pintura. De todas formas lo vamos a probar y desde luego os lo comentaremos.
Como he dicho antes el problema de comprarla ya hecha es el precio, pues un litro de esta pintura se puede colocar en unos 30 euros perfectamente y si la superficie que tenemos que pintar en grande imaginaos, y si además pensamos que tenemos que darle un par de capas al menos pues ya mejor ni nos lo planteamos. Pero aquí viene la solución, hacer nuestra propia Chalk Paint casera. No necesitamos muchas cosas y tampoco conocimientos previos ni nada por el estilo. Solo necesitamos los siguientes materiales:
Pintura Acrílica (el color que queráis)
Agua Caliente
Yeso (hay quien utiliza Gesso, que podéis encontrar en tiendas de pintura) La proporción de los tres "ingredientes" es 1 taza y media de pintura, 1/2 taza de agua caliente y 1/2 taza de yeso. Ya tenemos los materiales, como veis nada del otro mundo. Pues los pasos para hacer la pintura tampoco son complicados:
Poner en un recipiente la pintura del color que queremos.
Mezclar por otro lado el yeso con el agua caliente.
Mezclar esto ultimo con la pintura hasta que no queden grumos.
Y ya esta, con esto listo solo nos queda ponernos a pintar. ¿Habeis visto lo fácil que es? Ya solo queda ponernos manos a la obra y cambiar el aspecto de nuestro muebles, lamparas o lo que se nos ocurra. Os enseñamos algunos ejemplos.
Fuente: este post proviene de La Buhardilla Design, donde puedes consultar el contenido original.
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