El barniz parece ser conocido por todo el mundo. Sin embargo, cuando nos ponemos a pensar en qué es realmente este producto, las ventajas que tiene y sus usos, puede que no lo tengamos tan claro. A la hora de ponernos a restaurar muebles es un elemento fundamental, pero el barniz se puede utilizar en muchos más lugares y además hay distintos tipos.
Si quieres saber un poco más sobre el barniz te hablaremos de qué es este barniz, los tipos que hay y lo que puedes hacer con él. El resultado puede ser interesante para cuidar todo tipo de superficies. Además, se trata de un producto básico a la hora de renovar piezas en tu casa.
Qué es el barniz
El barniz es una disolución de resinas y aceites en una sustancia volátil. Este barniz se aplica en superficies y al contacto con el aire se endurece. De esta forma crea una película protectora que suele tener brillo e incluso un tono, el cual cambia la textura y aspecto de las superficies. Este barniz está pensado sobre todo para proteger el mueble u objeto de que se trate del paso del tiempo o de la acción de algunos factores como el aire o la luz.Tipos de barnices y acabados
Los barnices que se pueden elegir son muy variados en la actualidad. Para conocer el mundo de los barnices debemos tener bien claro cuáles son sus tipos, ya que puede haber varios de ellos. Dependiendo de lo que deseemos hacer podremos elegir uno u otro.
El barniz sintético es uno de los más utilizados a la hora de proteger los muebles. Este barniz nos ofrece un acabado muy liso, siendo uno de los más resistentes y duros. Es un barniz que se hace perfecto para los muebles que están en el exterior, en balcones, terrazas o a los que les da el sol directamente, para que se estropeen menos.
El barniz de poliuretano se suele utilizar en superficies que tienen mucho uso. Es un barniz que se usa por ejemplo en lugares como los suelos de madera o parquet, porque tienen tanto uso que se necesita un tipo de barniz que resista bien el roce.
El barniz acrílico, también llamado barniz al agua es un tipo de barniz que se utiliza sobre todo en muebles y en pequeños detalles. Se disuelve muy fácilmente y se usa con facilidad. Tiene gran resistencia pero se usa en obras tales como muebles renovados.
Otro tipo de barniz que quizás no es tan conocido es la llamada goma laca. Este barniz es de origen natural y se trata de un tipo de producto que se utiliza sobre todo en muebles antiguos, puesto que es mucho más respetuoso con los materiales. Es un barniz que resiste a cierto uso y al paso del tiempo, aunque solo se recomienda en muebles de interior.
El barniz nitrocelulósico es un tipo de barniz poco utilizado. Está pensado para instrumentos o para piezas que sean muy delicadas. Se ablanda con el calor y si se expone a la luz solar tiende a amarillear, por eso solamente se puede utilizar en piezas de interior.
En cuanto a los acabados, podemos encontrar diferentes tipos, ya que hay varios en el mercado. Uno de los más conocidos es el acabado brillante, ya que ha sido muy utilizado en todo tipo de muebles y en detalles como cajas o marcos de fotografías. También se usa mucho en los suelos para aportar más luz a los espacios gracias a ese brillo. El barniz tipo mate es muy resistente y duro y se utiliza principalmente para las puertas y ventanas, porque además les da un acabado muy elegante. Por otro lado, tenemos el barniz semibrillo o satinado, el cual tiene cierto brillo pero muy poco. Se usa para lugares en los que se necesita un uso continuo pero sobre todo se usa en suelos.
Usos del barniz
El barniz se utiliza sobre todo tipo de superficies con el fin de protegerlas, aunque en ocasiones también está pensado para dar cierto acabado con color a los muebles cambiando el tono de la madera. Estos barnices protegen del sol, del paso del tiempo, del uso y también de problemas como la carcoma, por eso es tan importante que la madera cuente con su capa de barnizado, tanto en puertas como ventanas y muebles.
A la hora de utilizar el barniz tendremos que elegir bien el tipo de barniz, su acabado y el tono. Siempre es mejor probar antes el color que le puede aportar al mueble. La madera debe estar lijada y limpia, para aplicar el barniz sobre ella. Se debe aplicar una capa que sirva de base, dejar secar por completo y después aplicar otra más sobre la madera. En ocasiones se aplica un barniz duro de base y otro con color sobre ese para dar un tono específico en la madera.