Muchos estilos de decoración llamados "modernos" expiran tan rápido como aparecen, sobre todo en la habitación infantil, una de las piezas de la casa más dada a experimentar en la búsqueda de originalidad y contrastes. ¡Pobres niños! Realmente a menudo se ven obligados a sufrir nuestros dudosos gustos.
Por suerte siempre podéis recurrir a uno de los patrones decorativos más versátil, elegante y que nunca pasa de moda: ¡Sí! Hablamos del patrón geométrico.
En todas sus variantes, desde los clásicos estampados asiáticos indúes, pasando por el protagonista del interiorismo años 60, el patrón geométrico nunca nos deja indiferentes.
Se trata de un patrón audaz, y llamativo por excelencia, perfecto para decorar la habitación infantil. Una sola pared basta para lograr un ambiente único y contemporáneo. Nunca os fallará.
En cualquiera de sus tratamientos, ya sea directamente estampado, estarcido o en papeles pintados, reinventado con el recurso de la ampliación, reforzará el dinamismo y la teatralización del espacio proporcionando alegría visual.
Alfombras, paredes, ropa de cama, accesorios, cojines... nada escapa a la energía positiva de un patrón geométrico bien escogido. Vosotros ponéis los límites.
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