Todos los cumpleaños son especiales pero el primer cumpleaños es tan bonito e intenso, no? Lo viví con muchísima ilusión. No hicimos una súper fiesta, solo una merienda en casa con los más amigos y la familia, pero fue una fiesta preciosa, llenísima de cariño y muy divertida.
Reconozco que para escoger el estilo y la decoración dudé un poco. ¡Esto de tener tantas cosas bonitas a mano es un lío para decidirse! La primera fiesta de mi hija mayor la hice de florecitas shabby chic, así que esta vez quería salir un poco del estampado floral y hacer algo diferente. Me tentaba mucho usar la colección Liberty de Meri Meri que está triunfando y me encanta, pero al final opté por los tonos pastel que también me chiflan. Así que los colores que predominaron en la fiesta fueron el rosa, mint y beige, y también sumé algunos detallitos en dorado.
Para la merienda preparamos una mesa con cositas dulces y saladas. Tenemos la suerte de tener una terraza y jardín en casa, así que hicimos todo al aire libre. Pusimos la mesa en el porche para aprovechar la sombra y, como está todo lleno de ventanas, preferí no utilizar una trasera rígida. En vez de eso, usé un pequeño tablero que puse sobre dos macetitas a modo de estante sobre la mesa. Así gané un poco de altura en la parte de atrás y allí ubiqué el nombre de Nuria y dos racimos de globos en tonos pastel inflados con helio.
Si me seguís en Instagram o Facebook habréis visto seguramente que estoy enamorada de los globos y las decoraciones tan bonitas que se usan ahora con ellos, sobretodo las guirnaldas de globos. Así que en la fiesta de Nuria no podían faltar. Hice una con mini globos rosas, mint, beige y transparentes con topitos blancos. Hacerla fue súper fácil con la cinta para guirnaldas de globos que tengo en la tienda. Estas guirnaldas se pueden hacer de mil formas y se suelen mezclar globos de distintos tamaños. Pero yo en este caso preferí hacerla solamente con globos pequeños porque iba a ir sobre la mesa y no quería que tapara el nombre y que fuera demasiado voluminosa. Quedó genial y hasta hace poco aún decoraba mi despacho.
Sobre la mesa también puse un póster que le pedí a mi hermana que me diseñara con algunos datos de Nuria. Había visto varios modelos en Pinterest y me pareció una idea genial. Una especie de natalicio pero que refleja cómo es la niña con un añito. Lo puse en un marco que pinté de rosa con chalk paint y lo ubiqué en uno de los extremos de la mesa. Lo mejor es que, pasada la fiesta, me queda un recuerdo súper bonito que puedo tener en su habitación.
Para la comida hice unos toppers con las etiquetas imprimibles que tengo en la tienda y los complementé con unos toppers de estrellas para sumar ese toque en dorado que quería.
Algo que triunfa cuando nos reunimos con amigos es la limonada, así que también puse en la mesa un dispensador de bebidas con limonada bien fresquita. ¡Es un acierto siempre!
Compro las frutas y verduras en un local ecológico que hay cerca de casa donde venden también unas cestas de madera para que puedas llevarte la compra. Son muy sencillas pero me parecen muy monas así que me hice con un par de cestas y las pinté de color mint. Les puse unas servilletas rosas a rayas dentro y allí serví las cocas de patata que cociné (unos bollos muy típicos de Mallorca). No soy ninguna “master chef” pero me gusta la cocina y las fiestas con cositas caseras. Al final es más trabajo y mi marido me dice cada año que para la próxima tenemos que encargarlo todo fuera. Y yo se lo reconozco y digo que si, pero en la próxima fiesta me vuelvo a liar cocinando… Es más estrés, pero disfruto tanto de prepararlo todo!
Para la tarta no me compliqué mucho, hice dos bizcochos de yogur que luego corté a la mitad así me quedaba una tarta bien alta. En un principio la iba a recubrir entera pero al final después de ponerle el relleno entre capa y capa me gustó porque parecía una “naked cake” en toda regla y la dejé así tal cual. La rellené de nata montada mezclada con mermelada de fresas y fresas laminadas. ¡No quedaron ni las migas! Como terminación le puse un topper que hice con pajitas de papel , baker’s twine rosa y las mismas estrellas doradas de la mesa, con una velita dorada.
Para el momento de soplar la velita, le preparé a Nuria una de las coronas doradas de My Little Day con un número 1 que hice en cartulina rosa. Y por supuesto, mi princesita mayor también tenía su corona.
Para los niños preparamos sobre el césped un pallet pintado de blanco donde pusimos su merienda. También pusimos una alfombra y cojines para que Nuria pudiera gatear y estar cómoda. Mi marido hizo un tipi de lo más resultón (nada como tener un manitas en casa) y también sacamos juegos, una pizarra con tizas… Quedó una zona muy chula y todos disfrutamos de estar allí de lo más distendidos. Tanto que acabamos pidiendo pizzas a las 10 de la noche porque nadie quería moverse! Pero en casa de herrero cuchara de palo y de toda esta zona no os puedo mostrar ni una foto decente. Es un pendiente que tengo, aprender fotografía. Y también mejorar los tiempos en casa que siempre me llegan los invitados y yo sin hacer fotos!
Pero bueno, aunque me falte toda aquella parte espero que la mesa os guste y os pueda inspirar si tenéis que preparar una fiestita para vuestros peques. Lo importante al final es ponerle muuucho cariño, pasarlo genial y tener un recuerdo hermoso de ese día. ¡Nosotros sin duda lo tendremos!
Un abrazo y hasta el próximo post,
Silvana
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