Uno de los primeros problemas que se nos plantean a la hora de reformar la cocina es: ¿qué materiales de muebles de cocina son los más adecuados? Esta es una pregunta importante a la hora de tomar una decisión, porque además de los gustos personales y el estilo que se quiera imprimir al espacio, hay que valorar otras cuestiones, como su resistencia, tolerancia a la humedad, facilidad de limpieza, el presupuesto con el que se cuenta…
Materiales de muebles de cocina, los más comunes
Estos son los más populares
A esto se añade sus cualidades estéticas. Los frentes laminados se obtienen recubriendo un tablero con un laminado decorativo junto a un papel kraft prensados entre sí con altas presión y temperatura y con una capa superior decorativa. La capa decorativa permite reproducir múltiples colores y acabados: mate, satinado, brillo o alto brillo.
En cuanto a la limpieza, es de lo más sencilla, con un limpiador jabonoso. Son superficies que por lo general no dejan las huellas marcadas. Sin olvidar la buena relación calidad-precio de frentes laminados y estratificados.
Se pueden encontrar muebles lacados en todos los colores y acabados en brillo, mate y texturizado. También se puede encontrar muebles con elementos curvos que resultan muy bonitos y originales.
El mantenimiento es idéntico al de los laminados, es decir, con agua jabonosa. Solo presentan un inconveniente de fácil solución: al ser superficies pulidas, los dedos pueden quedar marcados, sobre todo si se trata de acabados oscuros. Se pasa un paño mojado y escurrido y se seca bien después.
PVC o polilaminados. Estos materiales de muebles de cocina son finísimos folios de vinilos, que pueden imitar a materiales naturales, como la madera. Cada vez se usan menos, ya que no resisten bien el paso del tiempo o de temperatura y, al final, la lámina de vinilo se termina despegando.
Estilos tradicionales o vanguardistas
Los frentes también pueden limpiarse sin problema con los productos de limpieza habituales, evitando las sustancias abrasivas y los estropajos o lanas de aluminio. En cuanto a la humedad, la temperatura ambiente ideal para una cocina de madera es de aproximadamente unos 23ºC y la humedad relativa debería oscilar entre el 50 y el 55%.
Recubiertos de aluminio o de acero inoxidable. Estamos acostumbrados a ver estos materiales de muebles de cocina en las de los grandes restaurantes, pero también cada vez más en las casas particulares. Son cocinas de estilo industrial. Este tipo de mobiliario es muy resistente, fácil de mantener y de limpiar. Y duran muchos años. Su desventaja es que pueden crear ambientes un tanto frío, por lo que es recomendable combinarlos con acabados naturales en madera y con colores suaves.
Como ves, hay un gran abanico de materiales de muebles de cocina para elegir. Antes de decantarte por uno u otro, mira los pros, los contras y selecciona en función de lo que necesitas y le va bien a tu espacio, dependiendo del uso que hagas del mismo, porque vas a disfrutarlo durante muchos años.