Y es que crear tus propios cabeceros para la cama va a suponer un cambio drástico en la apariencia de tu dormitorio y le dará un aire muy distinto en consonancia con lo que quieras conseguir. Para ello, vamos a comenzar una serie de entradas para aconsejaros una ideas originales y sencillas que puedes poner en práctica hoy mismo.
Elige tu estilo
Lo primero que tienes que tener claro es el estilo que quieres darle a tu habitación y elegir el cabecero de cama que mejor se adapte o innovar en tu propio diseño: modernista, romántico, con un toque étnico, claramente vintage o estilo cottage. Con tan solo unas indicaciones generales y una ligera inversión los resultados que puedes obtener son realmente alucinantes.
1-. Cabecero de cama con puerta
En la foto que puedes ver más arriba tienes un excelente ejemplo de lo bien que queda reutilizar una puerta a modo de cabecero de cama, en este caso en suaves colores azul y blanco. Para ser más concreto, se trata de una puerta de estilo inglés que cuenta con cuarterones que le dan un aspecto más atractivo. Puedes reciclar una vieja que ya no estés usando o bien acudir a los rastros o tiendas de muebles para buscar una que encaje con tus necesidades.
El resultado, como puedes comprobar con tus propios ojos, es magnífico y combina especialmente con paredes de colores malvas muy suaves así como con ropa de cama blanca o en tonos lavandas.
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