Buenos días! Hoy vamos con la parte más práctica y menos "bonita" de las cocinas: la elección de la distribución de muebles y electrodomésticos. Cuando estamos pensando en el amueblamiento de una cocina, muchas veces nos prima lo estético, antes que lo funcional. Lo cierto, es que yo soy de las primeras en apuntarme a las ideas bonitas, sin pensar en el lado práctico del asunto. Pero ¡ojo!, que la cocina no es de esos espacios que se puedan improvisar, o nos arrepentiremos durante muuuuuuuchos años.
Es decir, el lavaplatos debe estar próximo al fregadero, y éste a su vez, cercano a los armarios donde guardaremos menaje y cazuelas... Obvio, verdad? Pues a veces se nos "olvidan" estas cosas que luego nos harán hacer kilómetros y más kilómetros de una esquina a la otra de la cocina (ahora me diréis que la vuestra es enana, pero da igual, de verdad que es importante!!).
En resumen os diré, que lo importante en la distribución y el diseño de la cocina, es que los tres puntos calientes (nevera, lugar de cocción y fregadero) estén muy próximos y, si puede ser, formando el famoso "triángulo". Una cocina bien pensada, es sinónimo de ahorro de tiempo y esfuerzo. Yo no soy muy cocinillas (ya lo he confesado en más ocasiones), pero mi cocina es muy cómoda a la hora de trabajar.
En este caso, lo funcional por encima de lo estético :)
Buen martes y gracias por comentar!
Coralia.
Vía Remodelista
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Fuente: este post proviene de Petite Candela, donde puedes consultar el contenido original.
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