El Feng shui, que se traduce como "tierra y cielo", es un arte milenario de origen chino, que tiene por objetivo conseguir armonizar la energía yin y yang de un lugar para favorecer la salud, el bienestar y la prosperidad de sus ocupantes.
Cómo escoger el colchón según el Feng Shui
Elegir un buen colchón es fundamental en la filosofia del Feng shui. Nunca debemos utilizar un colchón de segunda mano, porque no sabemos la energía que acumularon en él sus antiguos dueños.
Es importante invertir en un colchón que favorezca el descanso y la relajación para afrontar el día llenos de ondas positivas.
El rol de la almohada es igual de importante, ya que debe aportar seguridad. Escogeremos materiales naturales y la firmeza más apropiada para sostener de forma correcta la cabeza y las cervicales.
A la hora de elegir las sábanas y el edredón también debemos decantarnos por tejidos naturales que favorezcan la transpiración de la piel. Los tejidos sintéticos no son adecuados puesto que aumentan las alergias y generan electricidad estática.
Si tanto nuestro colchón como nuestra almohada y ropa de cama son de calidad conseguiremos dormir de forma plácida. Pero el feng shui también tiene en cuenta la forma de colocar los muebles para que la energía se armonice en el dormitorio.
Dónde colocar la cama para tener un buen Feng Shui
La posición de la cama en el cuarto es fundamental y debe gobernar la distribución del dormitorio. Ésta debe estar apoyada contra un muro sólido, que no tenga ventanas ni espejos.
Deberíamos posicionar la cama alejada de la puerta del cuarto y los más alejada posible de la puerta de la casa. No hay que dormir con la cabeza o los pies dirigidos hacia una puerta o una ventana.
La puerta no debe "cortar" la cama, es decir, la cavidad de la puerta no debe estar al mismo nivel que la cama, si no que debe dar a la zona de paso de la estancia como se puede observar en la imagen precedente.
Lo más indicado es que podamos ver quién entra en la habitación sin necesidad de girar la cabeza más de 45º.
La cama debe tener un buen cabecero que brindará protección y seguridad durante el sueño, haciendo que éste sea reparador.
La cama debe estar algo elevada para que la energía fluya alrededor de la misma. Las camas con almacenaje debajo del colchón no son por lo tanto adecuadas. Tampoco debemos colocar estanterías sobre el cabecero.
La cama no debe de dar a un baño ni a un pasillo ya que se cree que trae mala energía.
Datos a tener en cuenta para mejorar el Feng shui
Otros detalles que debemos cuidar para que el dormitorio tenga un buen Feng shui es la limpieza y el orden. No debemos tener ropa tirada por el suelo, ni trastos inútiles que puedan perturbar nuestro descanso.
Si dormimos en pareja todo en el dormitorio debería ser par y simétrico, como las mesillas de noche, los cojines, las lamparitas, etc
También hay que evitar la presencia de aparatos eléctricos que emiten ondas que impiden conciliar el sueño.
La luz del cuarto no debe ser fuerte, es recomendable usar una luz más tenue que favorezca la relajación.
Si tenemos espejos en el dormitorio éste no debería reflejarnos durante el sueño puesto que nuestra energía vital estaría moviéndose entre el espejo y nosotros durante la noche. Como ya mencioné al principio del artículo nunca se debe colocar un espejo sobre el cabecero.
Tampoco debemos tener aparatos para hacer ejercicio en el dormitorio porque traen energía activa, que impediría el descanso.
Los apuntes y papeles de trabajo no son los bienvenidos. Cada cosa tiene su sitio y su momento, por lo que debemos olvidar el trabajo cuando intentamos dormir.
Espero que todos estos consejos de Feng shui os ayuden a mejorar la armonía entre el yin y el yang de vuestro dormitorio.
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