Y no me refiero al Carpe Diem, sino al tiempo que necesitamos para llevar a cabo todas las tareas que queremos a lo largo del día y ser eficientes en su resolución.
Al ser madre, esta gestión del tiempo, ha cobrado una dimensión mucho mayor.
Ahora no sólo debo encontrar tiempo para ser eficiente en mi trabajo, llevar la casa, disfrutar de mis hobbies y mis amigos, sino que disfrutar de mis hijas y mi familia se ha convertido en mi motor principal.Salir del trabajo no es el fin del día de tareas, sino el comienzo de un montón de cosas que todavía quedan por hacer: compras, hobbies, extraescolares de las niñas, deberes, baños, cenas...
Es increíble y sorprendente la cantidad de cosas que se pueden hacer simplemente gestionando bien las 24h que tenemos durante el día. Y simplemente con pequeños gestos, podemos ganar bastante tiempo.
Ya te he contado en otras entradas, algunos de mis trucos para ganar minutillos al reloj en las tareas domésticas, simplemente organizando el menú semanalmente o teniendo organizados los zapatos.
Pero siendo eficientes en el trabajo también te puede ayudar a acabar antes y no tener que quedarte más horas de lo que corresponde a tu horario laboral, sin que por ello tu carrera profesional se vea dañada.
Todo cuenta. Al final deberíamos dedicar 8 horas a trabajar, 8 horas a dormir y 8 horas a disfrutar de nuestro "tiempo libre". Aunque en mi caso, llegar a dormir 8 horas seguidas sólo pasa los fines de semana y no todos. Si consigo dormir 7 horas entresemana, es todo un logro.
El secreto para gestionar bien el tiempo, ya sea en tu vida personal o laboral, reside en 5 palabras: organizarte, planificarte, priorizar, delegar si fuera necesario y poner los cinco sentidos. Acabo de mencionar una palabra mágica "poner los cinco sentidos", es decir, concentrarte en lo que estás haciendo.
Aunque estos consejos son válidos para todo el mundo, van dirigidos a la gestión del tiempo de la mujer trabajadora y la mujer por regla general tiene la habilidad de ser multi-tarea, es decir, poder hacer muchas cosas a la vez, aunque ésto no quiere decir que las hagamos todas bien.
Para desarrollar una tarea de forma eficiente y efectiva, debes concentrarte sólo en esa tarea y dejar momentáneamente el resto de lado. Yo te voy a contar, lo que a mi me funciona para aprovechar mejor el tiempo que tengo a lo largo del día. Te hablo desde mi experiencia personal como madre que trabaja fuera de casa. Lo puedes aplicar tanto a tu trabajo como a tu tiempo fuera de él.
1. Hazte con una agenda o similar, para planificar lo que quieres hacer a lo largo del día.
Hazlo nada más levantarte o antes de acostarte.
Yo suelo planificar el día, nada más levantarme que es cuando más despejada estoy. Pero cada uno somos un mundo, así que a ti te puede resultar más sencillo hacerlo al terminar el día.
2. No seas demasiado ambiciosa, prioriza. No asumas más tareas de las que eres capaz de realizar al planificar tu día.
Todos tenemos un montón de cosas que queremos hacer, pero también sabemos cuáles son las más importantes.
Así que planifica sólo aquellas que sabes que son realmente importantes y que eres capaz de cumplir. Sino, lo único que conseguirás es frustrarte y quedarte con la impresión de que la mitad de las cosas que querías hacer no las has sacado adelante.
Como dice el refrán, quién mucho abarca, poco aprieta.
3. Concéntrate. No te distraigas con los roba tiempos: móvil, RR.SS., tele, correo electrónico, etc.
Te puede parecer una tontería, pero si lo haces un montón de veces a lo largo del día, pierdes bastantes minutos valiosos.
Es más eficaz, ponerte horas en las que consultar el correo electrónico, el móvil, leer blogs y hacer llamadas.
4. Delega. Hay veces que nos cargamos con demasiada responsabilidad y trabajo y que nos agobiamos tratando de sacarlo adelante.
Tú sabes muy bien lo que eres capaz de hacer durante el día y lo que no, así que delega todas aquellas tareas a las que sabes no vas a poder llegar.
5. No te olvides de tu familia y de aquello que te hace más feliz. He puesto este punto el último, pero debería haber ido de los primeros.
Cuando apuntes todas las tareas en tu agenda, no olvides poner un límite de tiempo para hacerlas.
En mi caso, yo planifico mi día para hacer todo lo que tenga que hacer antes de las 18:30h. porque a las 19 es mi hora límite de llegar a casa para disfrutar dos horas de estar con mi hijas al 100%: jugar, bañarlas, que me cuenten su día mientras cenan...Esas dos horas son las mejores del día para mí, te lo aseguro.
Por supuesto que si puedo llegar antes, mejor que mejor. Todo tiempo que dedique a mis hijas, es tiempo de felicidad.
Cuando llega el final del día, es cierto que estoy cansada, pero muy satisfecha de la cantidad de cosas que he logrado hacer. Pero sobretodo, de haber llegado a casa feliz para poder vivir momentos mágicos con mi familia.
TU TURNO: ¿Te animas a gestionar bien tu tiempo? ¿Qué factores son los que más te distraen? ¿Qué crees que podrías mejorar? ¿Qué es lo que más feliz te hace a lo largo del día? ¿Le dedicas tiempo suficiente?
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