Uno de los imprescindibles en la cocina es una mesa o barra para desayunos y comidas informales. Claro, si el tamaño de la estancia lo permite. Pero incluso en pequeños espacios también hay diversas formas de lograr apartar un rinconcito para ese fin.
Una mesa o barra para comer o desayunar dentro de la cocina, facilita también el trabajo de servir, recoger o limpiar. Así no hará falta desplazarse al comedor frecuentemente, con lo cual ahorramos tiempo y esfuerzo.
Un diseño bien estudiado
Sin embargo, es necesario estudiar bien las áreas de despensa, almacenaje, lavado y limpieza, preparación y cocción. De ésta manera sabremos cuánto espacio queda, para que ese lugar sea cómodo y agradable.
Los materiales pueden elegirse igual a la encimera, a juego con los muebles o incluso un elemento que haga contraste. En muchos casos puede tratarse de un elemento de madera, como por ejemplo una gruesa tabla.
En cuanto a los tipos, aquí veremos tres de los más usuales, aunque no son los únicos. Todas son estupendos proyectos de Santos cocinas.
1. Barras simplemente apoyadas
La madera, el cuarzo, porcelánico o granito son los materiales que más se suelen usar. En contraste o a juego con la encimera permite una gran variedad de medidas y formas.
Por lo general, las alturas rondan los 95 cms. ya que se colocan encima de la superficie de trabajo. Sin embargo, en algunos casos se puede instalar a altura de mesa (75 cms.).
Aquí la barra de madera está fija alrededor de la isla y en forma de L, lo que permite tener una altura de mesa. De ésta forma, los taburetes no necesitan ser de altura especial.
Ésta gran tabla de madera se apoya en la encimera pero requiere una pata o base metálica como soporte en el otro extremo.
Y se puede colocar perpendicular a la isla, como en éste caso, o alineada, según lo requiera el diseño.
Ésta barra está sobre la superficie de trabajo e incluye un costado hasta el suelo que le da mayor estabilidad.
Una barra recta de madera como ésta es una de las soluciones más socorridas por su estética y funcionalidad.
Otra barra recta de madera, en un diseño con península. Muy práctica y fácil de instalar.
Ésta es una barra de pino envejecido, que aunque está apoyada en la isla, tiene las dimensiones de una auténtica mesa para 7 comensales.
Ésta barra de cuarzo blanco, se apoya en en el ángulo que forma la isla, formando un bloque.
Un sitio como este puede ser el ideal para colocar una barra apoyada entre mueble y pared. Y sencillo de instalar.
2. Mesas como extensión de la encimera
Éste tipo de barra o mesa se crea a partir de la encimera de la cocina. Cuarzo, granito, porcelánico o incluso de madera maciza son los materiales más usuales.
Y en cuanto a su forma, permite una gran cantidad de opciones según requiera el diseño. Una barra recta, angular, como península, con soporte o volada.
La encimera de cuarzo se prolonga para formar una mesa y como soporte en el extremo, una base metálica. Es para 2 personas pero podrían ser hasta 4.
Aquí la superficie de trabajo de cuarzo se prolonga de forma angular. Para 3 o 4 comensales.
Una pequeña península se ha creado solo con darle forma a la encimera. Como soporte, una pata metálica cilíndrica.
La columna se ha aprovechado como sostén de la barra y se ha incorporado al diseño del conjunto.
La barra más habitual: una encimera que se extiende hacia el lado posterior de la península.
Otra encimera que forma una barra en ángulo. Para 4 comensales.
En este caso la encimera de madera está soportada en su parte central por una pieza vertical del mismo material.
Una simple prolongación de la superficie de trabajo, aporta un lugar cómodo para comer y una estética elegante.
Una auténtica mesa formada por la extensión de la encimera y apoyada en un lateral del mismo material.
Y hasta una ampliación de la superficie, puede convertirse en una práctica barra. Y sin necesidad de ningún apoyo. Eso sí, no debe tener más de 60 cms. de volado si se trata de cuarzo o granito.
3. Mesas independientes adosadas
Muy apropiadas para cualquier estilo, se suelen ubicar sobre el lado estrecho de la isla. Por lo general el ancho es igual o un poco más pequeño que el de la isla al cual va adosada. Suelen ser para 4, 6 y hasta 8 personas.
Imponente mesa de madera donde pueden comer 6 personas. De ésta manera, el comedor forma parte de la cocina.
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Mesa de madera para 4 personas. Para desayunar y comer en familia.
Otra mesa independiente de madera, también de aspecto envejecido. Es el mejor modo de darle vida a una cocina totalmente blanca.
Para 7 comensales es ésta mesa de tono oscuro. La ventaja de una mesa cómo ésta es que se pueden utilizar las sillas de altura estándar.
Aparte de su función como sitio para comer, también puede ser un lugar de trabajo y preparación de alimentos. Y se pueden mover.
Ésta mesa no está adosada a la península pero forma parte de un conjunto estupendo.
Un pequeño rincón con un banco y 2 sillas puede convertirse en el lugar más acogedor de la casa.
Es posible que un buen diseño con barra o mesa de este tipo, propicie que se disfrute más de las comidas sentados a la mesa. Incluso a comer mejor y más saludablemente.
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