El baño es también al igual que la cocina un espacio crítico de almacenaje, pues aunque intentemos evitarlo al final se acaban acumulando multitud de cosas, ya sean de aseo o no. Pero además tiene ese particular sentido de privacidad, de espacio para uno mismo, de hecho es el único sitio de la casa donde las madres podemos pasar algún minuto solas sin interrupciones…..Por eso no puede ser un espacio de paso, tiene que ser un lugar en el que apetezca estar, y también por eso la sensación de desorden se acentúa aun más en el cuarto de baño, donde entramos buscando un momento de tranquilidad.
¿CÓMO CONSEGUIRLO?
Mantener el orden en el baño requiere al igual que con el resto de la casa pensar el espacio y esto implica tener las cosas que verdaderamente necesitamos y deshacernos de las que no utilizamos: productos de higiene personal, toallas, cremas, juguetes de los niños que ya no usan etc… y enfocarlo como si de la despensa se tratase, es decir sólo comprar un producto cuando esté a punto de acabarse el que ya tenemos, para no acumular innecesariamente.
Ubicar los productos por categorías también nos va servir para no tener 3 botes de gel, 2 tubos de pasta de dientes y 4 botes de colonia repartidos por diferentes estanterías o armarios. Y además tenerlos cerca del lugar donde los utilizamos, lo cual nos ayudará a por las mañanas ahorrar tiempo.
Esto implica también adaptarlo a las necesidades de todos los que utilizan el baño, especialmente para los niños, para fomentar también su autonomía en la higiene personal, como por ejemplo colgando un bote con sus cepillos y pasta de dientes al lado del bidé, a mis hijos les ha encantado la idea y hemos conseguido ahorrarnos muchas peleas!
La personal organizer Maria Galay nos recomienda muy acertadamente no tener las toallas guardadas en el mismo cuarto de baño para evitar que retengan la humedad, e intentar tenerlas en algún mueble cercano al baño. Si esto no es posible al menos podemos intentar tenerlas guardadas en algún armario o cesto con cubierta que las aisle. Eso si, siempre doblándolas en vertical lo cual que facilitará su almacenaje
Para el feng shui el baño es uno de los lugares más importantes de la casa pues es donde con más facilidad se estanca la energía y se concentra la humedad. Recurriendo a su aplicación he conseguido darle a mi baño una cálidez y confortabilidad que hacen que ahora cada vez que entro en él no me apetezca salir!
En el mapa agua de mi casa el baño está en el área de la prosperidad y la riqueza. Esta zona se trabaja para reforzarla con colores de la gama de los púrpuras, granates y rojos, y con metales. Los azulejos de mi baño son de color arena, y como tiene mucha luz al entrar en él hay una gran sensación de claridad, por eso la introducción del color rojo siguiendo las indicaciones del feng shui ha sido todo un acierto pues se ha equilibrado la intensidad de los colores claros dominantes. Con complementos textiles en colores rojos y granates como una cortina, un cesto para la ropa, y una alfombra alargada, he conseguido un espacio agradable y práctico, pues la alfombra nos permite poder estar descalzos sin sentir la frialdad del suelo, el cesto almacenar la ropa sucia y la cortina del baño es a la vez un elemento decorativo.
Por último con unos soportes metálicos y unas cestas para cepillas y jabones en el lavabo he conseguido el efecto orden y con cierto que tanto me gusta!
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