En primer lugar, y como os comenté en mi primer post, necesitaba reencontrarme con la yo más internauta. Esa yo que investigaba, averiguaba y descubría nuevas cosas que la fascinaban. Esta vez ampliando horizontes, y chafardeando de todo un poco.
He compartido con vosotros mi yo más íntimo en algunos aspectos. Os he enseñado lo que me gusta, lo que escucho, lo que veo, lo que pienso, lo que compro...
Además necesitaba este blog para descubrirme y encontrar por fin aquello que me inspirara para poder sentirme feliz conmigo misma. Sentirme realizada y sentirme productiva en algo que realmente me llenara. Por fin voy ordenando ideas, planeando ataques y colocando las piezas del puzzle que hay en mi cabeza. Y me digo yo: y todo esto en tan sólo un mes? Pues si, ya véis lo fácil que es, ya veo lo fácil que ha sido. Ojo, aún queda mucho camino, y además mi cabeza suele dar varios cambios de sentido normalmente, pero estoy feliz de tener cada vez más claro qué quiero hacer y hacía donde voy a ir.
Menuda paliza os estoy dando. Perdonad, pero para mí este primer mes de El Círculo Polar ha sido muy importante.
Agradecer a todos vosotros, leyentes de mi blog, pequeños amantes de las casualidades, gracias por estar ahí, por hacer que cada día crezca el número de seguidores. Agradecer a mis amigas, las de siempre, y compañeros de trabajo por el apoyo recibido. A mi hermana, por dejarse atrapar por el blog, que aunque le cuesta seguirme y leerme, lo hace por mí, y a Enric sobretodo, porque tú si has sido la parte más importante de que un mes después siga aún más ilusionada con esto. Gracias por apoyarme, motivarme y sobretodo inspirarme.
Feliz mes El Círculo Polar!! Porque nunca se acabe la gasolina!