!Pero hay tantas maneras de orientar este peculiar espacio!
Sobre todo porque suelen ser zonas limitadas y en ocasiones hay que darle un poco más a nuestra imaginación para conseguir las dos cuestiones más importantes, que sea eficiente y de diseño agradable.
Empezamos con un par de ejemplos sencillos en cuanto a elementos, pero sofisticados en cuanto a diseño.
Apenas un espejo y un asiento (el resto son adornos para unificar) Pero son los dos elementos los protagonistas.
La misma idea básica de espejo y asiento, dos elementos casi imprescindibles en un recibidor. La ultima mirada antes de salir y un asiento para cambiarnos el calzado al llegar.
Dos muestras más con un estilo más clásico y elegante, si cabe, donde intervienen algunos elementos más, además de los ya vistos.
En este caso con un bello asiento, tipo banqueta que realza el conjunto final.
Si nos decantamos por lo práctico, en este ejemplo tenemos un poco de todo, espacio de almacenaje y ordenación, pero sin olvidar un diseño cuidado.
Siguiendo con las ideas prácticas, una bella consola para guardar lo que sea necesario. Con unos tonos relajantes y de diseño actual.
En los dos siguientes ejemplos juegan también un papel especial los detalles de la pared. En el primer caso una bonita moldura blanca a media altura.
En el siguiente el juego de colores entre el papel de la pared y el mueble romántico y clásico.
Para acabar un recibidor que en realidad es un separador de espacios presidido por un magnifico espejo, que duplica la luz y el espacio, aunque este ultimo sea aparente. Un sillón de diseño y una vistosa lampara son suficientes para que quede espectacular.