Algunos de vosotros ya conoceréis sus bondades, para el resto de lectores deciros que el microcemento es un revestimiento resistente que se puede aplicar tanto a suelos como a paredes y techos. Una de sus cualidades estrella es que no necesita juntas, por lo que su limpieza y mantenimiento son extraordinariamente sencillos.
Yo me considero fan incondicional de este maravilloso material, sobre todo cuando existen empresas fabricantes como Topciment que ofrecen una garantía de 5 años para nuestra tranquilidad.
El microcemento se puede emplear en la decoración de exteriores e interiores: en jardines, patios, terrazas, azoteas, baños, cocinas, dormitorios... ¡y salones! Precisamente, hoy os quiero hablar de esta última estancia, mostrándoos increíbles imágenes que os servirán de inspiración. ¿Os lo vais a perder ;)?
Existen varios tipos de microcemento, aunque para estancias como los salones, en los que el tránsito es elevado, os recomendaría una opción de textura media como Microdeck.
Además, si cumplo con el objetivo de este post y acabáis tan enamorados como yo de este material, posiblemente queráis cubrir con él también paredes y techos, así que apuntad la otra tipología por la que deberéis preguntar en Topciment: el microcemento de textura fina Microfino.
Igualmente, os podría interesar Microbase, una de las mejores opciones para hogares de estilo rústico, dados su aspecto artesanal y textura irregular.
El microcemento casa a la perfección con gran parte de los estilos decorativos: rústico, minimalista, nórdico, industrial, etc. Veamos algunos ejemplos...
Empezamos nuestro paseo por el universo del microcemento centrando nuestra atención en los salones rústicos.
Tomando como referencia, tal y como os comentaba en el punto anterior, el modelo Microbase, complementaremos el look con mobiliario en madera y detalles en materiales naturales. Las vigas aportan calidez; el microcemento, vanguardia y sofisticación. ¡La combinación perfecta!
Dentro del estilo industrial también encontramos un hueco estupendo para el microcemento, de hecho, posiblemente sea la estética que mejor comulgue con la esencia de este material. Tal y como podéis observar en la siguiente imagen, el resultado es magnífico.
De este salón llaman especialmente mi atención los grandes ventanales que potencian la luminosidad de la estancia, el sofá chester y la mesa DIY creada a partir de una caja de botellas de vino. ¿Mi valoración? ¡De 10!
Como ya sabéis, resulta muy complicado encontrar un ambiente en el que tan solo se emplee un estilo decorativo. Normalmente, las diferentes estéticas se fusionan en busca de personalidad, y esta esencia es la que se consigue transmitir en el siguiente salón.
Aunque la base arquitectónica podría encajar dentro de la tendencia industrial, la decoración es absolutamente escandinava: las sillas, la mesa baja, el sofá... De nuevo, el microcemento se convierte en el mejor aliado para firmar una decoración perfecta.
En último lugar, que no menos importante, echaremos un vistazo a un loft minimalista absolutamente espectacular.
Los colores blanco y negro son los reyes de la decoración, aunque destacan el gris del microcemento como tono de transición y los detalles en madera. Posiblemente este salón sea uno de los mejores ejemplos a la hora de aprender a combinar el microcemento y aprovechar todo su potencial estético. ¡Me encanta!
De estas imágenes podemos extraer varias conclusiones:
- En primer lugar, que el microcemento y la madera son mejores amigos.
- En segundo lugar, que la ausencia de juntas provoca un efecto de continuidad que aumenta visualmente el espacio. Aunque las imágenes que os he mostrado no reflejan espacios pequeños precisamente, gracias a esta característica, las casas de tamaño reducido se verán tremendamente beneficiadas; sobre todo si se cuenta con un jardín, patio o terraza y se emplea el microcemento en toda la superficie (interior y exterior).
Como sé que os encantan las imágenes de inspiración, cierro el post con algunos de los proyectos de Topciment, empresa fabricante de microcemento con la que os podéis poner en contacto para que os ayuden a conseguir salones así de bonitos.
Antes de despedirme, me he guardado un as en la manga, pues más allá de todas las ventajas que he descrito sobre este material, os interesará saber que para su instalación no se necesitan complejas reformas.
En un pispás, colocándolo directamente sobre cualquier superficie, incluso azulejos, podréis empezar a disfrutar de este milagro hecho pavimento.
Ahora sí, ¡hasta el próximo post ;)!