Conseguir la mezcla perfecta es una de las tareas más difíciles a la hora de decorar. Digamos que aquel que consigue manejar el arte de la mezcla y el contraste es que ha alcanzado una de las maestrías en decoración.
(Foto: TMagazine)
Mezclar patrones, colores, formas y texturas con gusto y armonía es probablemente la meta a la que todos aspiramos.
(Foto: Kimberly Genevieve)
¡Cuántas veces hemos visto tantos ejemplos de espacios en los que todo parece estar ahí por causalidad y son embargo queda tan bien! Muchas veces, cuando empezamos a decorar nos encontramos con el impulso de combinarlo todo, y aunque la paleta de colores es importante como punto de partida, podemos arriesgar y buscar el contraste en la diversidad.
(Foto: AD España)
Con la vuelta del estilo bohemio, parece que vuelve el arte de mezclar. A mí siempre me han encantado los juegos de textiles con diferentes estampados y colores. Los espacios en los que se mezclan rayas, flores y dibujos en diferentes colores, pero no creo que sea fácil conseguir naturalidad en los contrastes. Supongo que uno de los secretos es que cada pieza del conjunto sea bonita incluso fuera de ese contexto.
(Foto: Elle Fr)
Pero además está el punto de arriesgar, de introducir un elemento inesperado y de sorprender. Con estas tres premisas siempre se asegura el estilo, ¿no creéis? ¡Pues estad muy atentos, porque dentro de poco ampliaremos nuestra guía de estilo con algunos conceptos como estos!
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