(imagen: Myleitmotiv)
En la cocina está tendencia ha ganado mucho protagonismo con estanterías donde quedan a la vista los platos, las tazas, los botes... Como vemos hay que cuidar mucho la estética y lo mejor es reservarlo sólo para un pequeño rincón del office, puesto que puede coger mucha suciedad.
(imagen: May_flo)
En el dormitorio la tendencia llega en forma de burros con ropa que se ubican a los pies de la cama o en un lateral. De nuevo como en la cocina, debemos optar por prendas que no arrastren y guarden cierto parecido cromático... En definitiva es más una opción estética que una solución de almacenamiento real.
(imagen: Es_escandinavo)
Siguiendo esta corriente, aunque con muchos matices vemos en el salón las vitrinas. Lógicamente no es lo mismo, porque tienen puertas y resguardan los objetos del polvo, pero vemos su interior.
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¿Os gusta esta tendencia u os parece poco práctica?