Sin necesidad de grandes espacios, ésta cocina cubre todas las necesidades de cualquier entusiasta chef.
Un diseño con transiciones de claro a oscuro, que resalta sobre la pared, y que a su vez, hace juego con el resto de la casa.
La gran isla es la protagonista, ya que se puede utilizar por cualquiera de sus cuatro lados. El horno, la placa de cocción, el fregadero y una barra para comer están disponibles en cada uno de ellos. Algo genial si se acostumbra a trabajar más de una persona al mismo tiempo.
Y en cuanto a ese bloque aislado, se ha construido en su totalidad de Corian blanco. Este material sintético, garantiza que se pueda trabajar en una superficie limpia, duradera y fácil de renovar si ocurre algún desperfecto.
Además, éstas superficies sólidas y sus adhesivos y selladores, son de baja emisión de compuestos orgánicos y no son tóxicos para las personas.
Tanto el fregadero de una cubeta, como la cavidad auxiliar para aceites y botellas situada en medio, están integrados en la encimera. Incluso la tabla para cortar de madera oscura que se encuentra encima del horno, está enrasada convenientemente.
Por el otro lado de la isla, destaca la placa de cocción Bora Professional con sus botones embutidos en el grueso canto de Corian. Debajo, una gran zona de almacenaje con 4 cajones y 2 caceroleros.
Y en el otro extremo, no puede faltar una práctica barra para desayunos y comidas rápidas. O para el aperitivo.
Mientras tanto, sobre la pared, un mueble de madera oscura compuesto por columna frigorífico y despensa, incluye también un módulo central enmarcado en piedra.
Allí está ubicado un horno, vinoteca, repisas y cajones en la zona inferior.
Este es un estupendo proyecto de firma holandesa Culimaat.
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