Un sofá cama es mucho más que un mueble, es más que un sofá y más que una cama. Este es uno de los muebles más funcionales que puedes tener. Tener una cama en tu sala de estar en lugar de un sofá, podría ser la forma de superar las limitaciones de espacio que puedes tener. Te permite convertir cualquier habitación en una habitación de invitados, o incluso en una habitación para ti si vives en un apartamento tipo estudio.
Si quieres comprar un sofá cama es sin duda una buena opción, pero debes tener algunas cosas en cuenta antes de hacerlo. ¿Quieres saber qué es lo que debes reflexionar en cuanto a esto? ¡Te lo contamos a continuación!
¿Quién lo va a usar?
Si bien su funcionalidad puede ser un aspecto muy importante, hay varios otros factores que debe considerar antes de comprar. Como con cualquier mueble, ten en cuenta tus necesidades. Lo más importante a considerar si se utilizará principalmente como cama o para sentarse.
Si quieres usarlo como una superficie principal para dormir, busca el tipo de colchón que viene con él. Como sin duda sabes, los sofás camas vienen con muchos tipos diferentes de colchones, algunos con materiales especiales, algunos vienen con resortes internos y otros son camas de aire. Intenta encontrar con un tipo de colchón que te guste usar. Además, busca un mecanismo que se abra y cierre fácilmente.
Como hay muchos fabricantes que ofrecen sofás cama, notarás grandes diferencias tanto en calidad como en precios. No hace falta decir que compres la mejor calidad que puedas pagar. A menudo, los sofás cama en puntos de precio más altos también están mejor hechos.
Elige sabiamente si tienes un espacio pequeño
Si tienes un espacio muy pequeño, entonces los sofás cama tamaño pequeño pueden ser la respuesta perfecta para ti, ya que son ideales para dormir una persona. El colchón para un sofá cama doble bastante más que el colchón para una sola persona.Tendrás que medir la longitud y la anchura del colchón cuando el sofá cama esté abierto, solo de esta manera podrás saber si te va bien en el espacio que tienes disponible en tu hogar. Recuerda que a veces lo más barato no es mejor ni tampoco lo más caro, lo ideal es que encuentres un producto que tenga calidad precio. Para averiguarlo no te bases solo en lo que te dice el vendedor, busca referencias de clientes que lo hayan usado antes para saber si realmente merece el dinero a pagar.
Si el espacio no es un problema
Cuando el espacio no es un problema, tienes suerte, ya que un sofá cama grande es el más disponible. Podrás encontrar fácilmente camas grandes en diferentes estilos y telas y con tu tipo de colchón preferido. Hay una gran cantidad de variedad disponible en este tamaño.Un sofá cama doble puede acomodar fácilmente a tres y puede proporcionar una cama cómoda para dos personas. Recuerda abrir el sofá cama para asegurarte que queda bien en tu espacio. Esto es importante porque aunque tengas mucho espacio en tu estancia y creas que no es un problema… es mejor que te asegures. Tener mucho espacio y un sofá cama pequeño puede quedar una estancia desequilibrada.
Por este motivo, mide bien el sofá cama y el espacio que tienes disponible para saber cómo quedará una vez que lo tengas instalado en tu hogar. ¡Así te evitarás sorpresas desagradables!
Un poco más de espacio para estirarse es igual a comodidad
Si el sofá cama se va a usar todas las noches para dormir, lo que necesitas es un sofá cama de tamaño completo, incluso si tienes un espacio pequeño. Un adulto puede encontrar una cama doble demasiado pequeña y restringida para el uso diario, y, en caso de necesidad, una cama grande pueden dormir hasta dos personas. Pero, de nuevo, si dos personas lo van a usar regularmente, la cama de tamaño completo podría no ser muy cómoda o lo suficientemente espaciosa.
Para sentarse, el tamaño de una cama de tamaño completo es entre un sofá y un sofá de dos plazas, más bien como un sofá de apartamento, por lo que sigue siendo una buena opción para espacios y apartamentos más pequeños.
De cualquier modo, y escogiendo la opción que prefieras, recuerda que merece la pena pagar un poco más puesto que está tu descanso en juego. Tu cuerpo necesita tener un colchón donde reponer la energía durante la noche. Evita sofás cama de mala calidad puesto que lo que te ahorras por un lado tendrás que gastarlo en un fisioterapeuta o quiropráctico porque tendrás la espalda con demasiado dolor y contracturas. ¡En cuanto al descanso no hay que escatimar precios ni calidad! Busca y compara, hasta que encuentres el sofá cama idóneo para tu hogar y para ti.
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