¿Tu niña se ha hecho mayor pero su dormitorio aún no? Puede que haya llegado el momento de darle un nuevo aire… ¡de arriba abajo! Te damos algunas ideas geniales de habitaciones para niñas que te servirán de inspiración.
La vida transcurre deprisa. Y no hay forma más rotunda de darse cuenta que tener cerca a un niño. Si tu pequeñina ya ha crecido y sigue teniendo el mismo cuarto que cuando era un bebé, seguramente ha llegado el momento de cambiarlo. Aquí tienes 10 habitaciones para niñas que te van a gustar. Y a ella también.
Hay varias cosas que tendrás que tener en cuenta antes de empezar a diseñar el cuarto de tu hija. Y una de ellas es que, si ya ha cumplido los seis años, probablemente deberás tener en cuenta su opinión. Piensa que aunque tú seas el que decide, es importante que le guste su cuarto y que se sienta a gusto en él. Y para conseguirlo puedes dejar que elija ciertas cosas como el color de las paredes o los muebles. En cualquier caso, podéis negociarlo entre todos, ¿no crees?
Habitaciones para niñas que crecen
Los dormitorios infantiles han de crecer con sus dueños. Está claro que no al mismo ritmo, pero sí es necesario que evolucionen. De otro modo, no resultan nada prácticas, ni útiles ni eficaces para conseguir que los niños se sientan a gusto y desarrollen al máximo todas sus capacidades.
Los peques pasan mucho tiempo en sus cuartos, y más según se van haciendo mayores. Allí juegan y descansan, primero, y después también leen y estudian. Y se entretienen de otras maneras diferentes y variadas.
El caso es que cada edad tiene sus necesidades, en lo que a la planificación se refiere. Si tu niña ya no es un bebé y ya ha terminado la educación infantil, seguramente necesitará que cambies su dormitorio. Hay muchas ideas para planificar habitaciones para niñas.
Bonito sí, pero también funcional
Cuando los niños comienzan la etapa de Educación Primaria y aprenden a leer y a escribir, comienzan a necesitar un lugar en el que hacer los deberes. Lo ideal es proporcionales un espacio de estudio tranquilo en el que puedan concentrarse fácilmente. Con una mesa adaptada a su edad. No se trata de que le montes un escritorio de adulto, pero has de darte cuenta de que la mesita de juguete y la sillita que ahora tiene ya no le sirve.
Lo mismo sucede con la cama o con las zonas de almacenaje. Que han cambiado su razón de ser. Y cuando vayas a elegir los muebles, piensa en su funcionalidad. Está muy bien que sean bonitos, pero también han de ser prácticos.
Delimita las zonas de uso
Puede que el cuarto de tu hija sea pequeño, pero no por ello has de dejar de dividir el espacio en distintas zonas de uso. Una sería la zona de descanso, donde estará la cama. Otra la zona de estudio, con su mesa o escritorio, una cajonera o un espacio para guardar el material escolar, libros, etc.
También tendrás que definir una zona de armarios y módulos de almacenaje, que variarán en función de la edad de la niña. Si todavía es pequeña, aún tendrá que guardar juguetes. Y si es ya más mayor, lo que tendrá que almacenar serán libros, ropa, etc.
Sea cual sea el espacio, las habitaciones para niñas más organizadas son aquellas que establecen una cierta división por zonas de uso.
Para espacios reducidos
Si tienes la suerte (o la tiene tu pequeña) de disponer de un dormitorio amplio para tu hija, estás de suerte. Lo más habitual es que las habitaciones para niñas sean más bien pequeñas, o que la tengan que compartir con su hermana.
Si este es tu caso, no te preocupes. Existen un sinfín de soluciones específicas para cuartos infantiles pequeños. Como las camas abatibles, por ejemplo, que ya no tienen nada que ver con las de antaño, tan feas y aparatosas.
Hoy en día existen modelos de camas abatibles que resultan muy decorativas. Las habitaciones son diáfanas por el día, con espacio suficiente para jugar y estudiar, y se transforman por la noche sin perder ni una pizca de encanto.
Otra alternativa para espacios reducidos es la de poner una litera o cama en alto y dejar espacio para zona de estudio debajo. Así aprovechamos la altura de la habitación y ganamos unos metros muy valiosos. ¿Qué te parece la idea?
No te olvides del toque final
A la hora de decorar habitaciones para niñas nada está dicho hasta que no suena la última palabra. Y con esto quiero decir que el toque final es muy importante. Una habitación sencilla, con muebles de líneas rectas de color blanco, por ejemplo, podría parecer anodina y sosa. Sin embargo, si le añadimos algunos detalles bien pensados, la cosa cambia… ¡y mucho!
Y es que el toque final, y muchas veces el color, lo ponen los accesorios, los complementos, la ropa de cama o las cortinas, la decoración de las paredes, etc. Pon atención a estos aspectos y verás qué resultado. A tu hija le encantará su nuevo dormitorio. ¡Seguro!
Puedes leer la entrada original y completa en de la revista online Decoración 2.0.