Hoy quiero compartir con vosotros el antes y después de mi dormitorio. Como ya os había comentado, cuando entré en mi piso había algunos muebles. Muchos los utilicé vistiéndolos, pintándolos, customizándolos, incluso algunos los he aprovechado por trozos (no es broma, pero eso ya os lo cuento otro día).
Lo que quiero decir es que, como con los muebles, las habitaciones se pueden vestir, pintar, customizar…, y convertirlas en algo nuevo aún reutilizando cosas que ya estaban.
Para demostrarlo, os enseño este antes/depués:
Sí, ya sé que era fácil de mejorar, pero no ha quedado mal, no?
Creo que estaréis de acuerdo conmigo en que lo más destacable del cambio es la sensación de amplitud; la habitación parece más grande en la segunda foto. Lo más fácil para conseguirlo es una buena distribución del espacio y utilizar un mobiliario adecuado al tamaño de la habitación. Los colores que elijamos, tanto para la pared como para muebles y complementos, también cambiarán mucho el ambiente de la estancia.
Podéis ver la otra parte de la habitación aquí y los detalles del rincón de lectura aquí. En ambos post os doy la información necesaria para copiar el look si os gusta para vuestra casa.
También os he enseñado ya en otro post el DIY que hice con la cajonera marrón que veis en la foto del antes.
Como veis, cualquier estancia se puede convertir en algo completamente diferente, no os dejéis engañar por las primeras impresiones!
¿Qué os parece el cambio?
¿Habríais hecho algo diferente?
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