Perfectos para crear diferentes estilos
A la hora de elegir nuestro cabecero de cama, es importante tener en cuenta el estilo decorativo que queremos que tenga el dormitorio. Partiendo de esa base, podremos encontrar el mejor cabecero que nos ayude a conseguir esa decoración tan buscada. En este caso, el material utilizado en su fabricación puede resultar clave. Por ejemplo, en el caso de querer darle un toque rústico a esta zona de la casa, los cabeceros de forja puede ser la mejor opción, cabeceros que aportarán elegancia y que nunca pasan de moda.Por otro lado, tenemos la opción de apostar por los cabeceros de madera si buscamos algo más clásico. En este caso, suele ser habitual que forme parte de la estructura de la cama, incluso que cuenten con otros elementos como mesitas o sinfonieres. En el caso de buscar un toque más moderno o minimalista, los cabeceros acolchados son la opción perfecta para conseguir ese estilo decorativo. En este último caso, es habitual encontrarlo en una amplia gama de tonalidades, lo que le da versatilidad a la hora de utilizarlo en cualquier dormitorio.
Tipos de cabeceros
Si nos fijamos en los tipos de cabeceros que nos podemos encontrar, dejando el material de fabricación a un lado, los podemos clasificar en dos grandes grupos: los cabeceros colgados y los cabeceros apoyados en el suelo.Cabeceros colgados
Como su nombre bien indica, estos cabeceros se cuelgan en la pared ofreciendo una estética más moderna. Al estar separado del suelo, ofrece un efecto visual de mayor amplitud, creando una sensación de espacio distinta.Cabeceros apoyados en el suelo
En este otro caso, los cabeceros apoyan en el suelo, creando una sensación de mayor robustez. Estos cabeceros son capaces de ampliar visualmente el espacio de lado a lado.Cabeceros tapizados, opción más demandada en la actualidad
Cabeceros de cama: elemento clave en la decoración del dormitorio 2 Como hemos comentado, nos podemos encontrar diferente estilos de cabeceros, pero en los últimos años, los cabeceros acolchados se han convertido en los más demandados debido a su versatilidad en comparación con otros materiales. Veamos a continuación algunas de las principales características de estos cabeceros acolchados.
Ideales para crear un ambiente acogedor, una característica que invita a un mejor descanso.
Debido a su estructura acolchada, se convierten en elementos multifuncionales que pueden ser utilizados como respaldo para leer, estudiar e incluso trabajar.
Ayudan a crear un efecto cálido en la estancia debido a los materiales utilizados para su fabricación.
Son capaces de dar un toque sofisticado y minimalista al dormitorio. En este caso, los colores neutros resultan clave para conseguir ese efecto.
La facilidad a la hora de limpiarlos es otra de sus principales características.
Suelen ser cabeceros más económicos que los fabricados en otros materiales, algo que ha ayudado a que sean más demandados. Esto no significa que no sean elementos resistentes, más bien todo lo contrario. Por todo lo que hemos comentado, el cabecero de cama no solo lo tenemos que ver como un mueble más que forma parte del dormitorio, sino como un elemento que se encargará de aportar comodidad y confort a tu descanso cada noche. La sencillez y la funcionalidad de los cabeceros de cama pueden ser la clave para conseguir este objetivo.