Con los muebles y detalles que teníamos en el taller fuimos haciendo diferentes composiciones que, al final, terminarían determinando el nombre que se le ha dado a cada habitación. Esta primera, os imaginaréis que es la amarilla... La mesilla y el cajón en la pared marcan la diferencia con el resto del mobiliario, que se repite en todas los cuartos.
La crisis del Covid lo paralizó todo... El proyecto entero quedó en el aire y nosotras con él... Pero finalmente se retomó y cobró vida... Eso sí, nos ha tenido más que enredadas todo el mes de agosto, así que las vacaciones este año, por éste y otros motivos de peso, han estado muy moviditas...
¿Sabéis cómo se llama este otro dormitorio? Pues coral, como el toque de color que le añade nuestra mesita, la cajita de gambas que reciclamos y redecoramos en su día, y el cojín a tono. Por cierto, el cabecero lo adquirimos en el mismo hiper asiático dónde compramos el de una de nuestras Julias...
Verde que te quiero verde... gracias a la coqueta telefonera...,
...,y la caja de vinos que hace las veces de pequeña estantería.
La aportación Retro y con encanto para el último cuarto está en el cabecero y en la cajita que decora la pared...,
El alquiler va destinado a chicas, y queríamos darle, en la medida de lo posible, un aire vintage y delicadamente femenino.
No queremos olvidarnos del salón... Había que contrarrestar este área tan tecnológico con un toque de los nuestros ¿no os parece?
Ya os comentamos, cuando publicamos el reciclaje de estos dos cajones, que iban destinados a una pared...
Os dejamos, para terminar, una visual del salón, decorado en tonos grises y rosas...,
..., y de la cocina. Todo terminado al límite y sin mucho tiempo para florituras... Nos habría gustado sacar fotos más decorativas de las zonas comunes, pero ha sido materialmente imposible.
Hemos disfrutado mucho con este proyecto; es muy ilusionante imaginar, y luego verlo reflejado en la realidad...
Esperamos que el veranos os haya ido muy bien a todos, poco a poco nos iremos poniendo al día con vuestros blogs, ¡besos y abrazos virtuales de bienvenida!