Hoy hablaremos sobre la decoración decembrina y cómo minimizarla.
Hemos llegado a la cuarta y última reflexión de este colaborativo con Nazaret de Misterios DECO. Y gracias a esto he tenido la oportunidad de poder reflexionar sobre la transformación que ha tenido La Morada y hacia dónde quiero ir este 2017. Pero antes de sumergirnos en este última reflexión, quiero agradecerle a esta chica tan maravillosa.
Querida Naza, disfruté enormemente trabajar contigo. Y aunque me arrancaba los pelos por tener tantos proyectos para el cierre de año, no me arrepiento de haberme comprometido con un proyecto más. Conocí otra perspectiva sobre el minimalismo y la decoración y ha sido de gran aprendizaje para mí. Es increíble encontrarse con gente tan linda y apasionada en la blogosfera. Y vaya que es aún mejor cuando se comparten puntos de vista.
Sé que es nuestro primer colaborativo pero espero que no sea el último. Espero con ansias este 2017 por ver qué nos deparará este nuevo año. Que seguro serán muchos proyectos, nuevas experiencias y buenas vibras para las dos.
Y ahora, querida lectora, es momento de compartir mi punto de vista sobre la decoración decembrina y cómo mantenerla al mínimo pero siempre bonita y funcional.
He conocido a personas que tienen más de 3 sets navideños –luces, pino, adornos, esferas, lazos. Los rotan por año y van incorporando nuevos accesorios también. La verdad es que me sorprende que alguien quiera guardar tantas cosas. Si muy apenas yo tengo más de 30 prendas para todo el año, no me imagino como será tener tantos accesorios navideños. Y no es malo tener arreglos que se usan una vez al año, si no la actitud tan consumidora que arrastra a muchos a querer tenerlo todo.
Es importante saber desprendernos de las cosas materiales y a ser más conscientes con nuestras compras. Sinceramente no hace mucho sentido querer “vestir” la casa diferente cada año, casi casi como lo hacemos con la ropa. Los productos consumen recursos y no se aprovecharán al 100% por lo que si vas a comprar algo hay que comprometernos a utilizarla.
Decía Nazaret en su primera reflexión:
[…] Si lo haces sin conocerte bien, sin saber lo que te gusta o lo que necesitas te verás en la situación de tener que cambiarlo todo.
Y vaya que tiene mucho de razón. Si descubrimos que tenemos el hábito de querer mucho de lo mismo hay que ver el origen de ello. ¿Es porque somos unas locas empedernidas por la decoración o queremos llenar un vacío? Los diseños en los escaparates nos convencerán que comprando obtendremos una satisfacción inmediata. El problema es que la felicidad se desvanece muy pronto y nos olvidamos de resolver los asuntos del corazón. ¿Qué me falta? ¿Por qué me siento así?
Hay que procurar que las cosas de temporada se mantengan al mínimo o que sean más flexibles para que se pueda variar año con año. No se requieren sets completos de todo, es solo cuestión de usar el coco.
CÓMO MINIMIZAR LA DECORACIÓN DECEMBRINA
En vez de pino utiliza algunas ramas.
Si compras pino natural, que venga en maceta.
Haz esferas y colgantes con materiales que ya tienes.
Recuerda que el blanco es el rey de los fríos, ¡aprovéchalo!
Intenta reflejar el exterior en casa (ramas secas, colores fríos).
Utiliza velas aromáticas para que la casa tenga esencia navideña.
Para un pino original, decora y arma un diseño de árbol en la pared.
No compres algo similar hasta que sea realmente necesario.
Intercambia la decoración con amigos y familiares.
Recuerda que lo importante es la esencia, no lo material. Estos son simples consejos pero es una forma de minimizar la decoración decembrina, y sin mucho esfuerzo. ¿Qué te parece? ¿Seguirás algún consejo para la próxima?
última reflexión del año @lamoradasimple @MisteriosDECO
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