Como ya hemos comentado, el salón suele estar presidido por el árbol de Navidad. Más allá, buscaremos inspiración para crear pequeños rincones llenos de magia, a partir de ideas como tarros de cristal con velas en el aparador, un bonito centro de mesa hecho por nosotros o láminas deseando una bonita Navidad a todo el mundo.
Al final, los pequeños detalles serán los que nos creen una atmósfera navideña. Además, podemos innovar con ideas mas creativas que no se reduzcan a los colores y adornos más típicos del árbol.
Un DIY genial y que no nos costará nada de tiempo, es crear una bandeja con motivos navideños para nuestra mesa de centro. Podemos partir de un plato de madera o de una bandeja simple e ir poniendo alguna vela, piñas o adornos navideños, como pequeños renos. Es muy versátil y podemos ir probando nuevas combinaciones.
Salimos del salón y vamos a centrarnos en el recibidor de la vivienda. Cuando cruzamos la puerta de casa, la primera impresión debe transmitir paz, tranquilidad y resultar muy acogedora, y mucho más en Navidad, cuando las temperaturas empiezan a descender bruscamente. Cuidar que la luz sea cálida y colocar una alfombra debe ser prioritario. Aparte, otras opciones pueden ser poner guirnalda, un poco de acebo o muérdago en un jarrón y buscar algún guiño a esta época.
En los últimos años, el mundo DIY ha entrado con fuerza en la Navidad, y gracias a él encontramos fórmulas para decorar alguna pared vacía o, incluso, el cuarto de los más pequeños. Por ejemplo, diseñar un árbol de Navidad con madera de palés que no ocupe ni un solo centímetro, pintar una pizarra con algún mensaje acorde a la época o crear una guirnalda con piñas que recorra una de las paredes del pasillo.
¿Cómo va a ser la decoración de Navidad de este año en vuestra casa?