Los primerísimos en colocar las toallas...
Toda la inmensa playa para nosotros...
A eso de las nueve los cielos parecían formar parte de las nubes y lo que más apetecía era sentarse relajados a observar el bello paisaje...
Que privilegio tener una playa así de preciosa a tan solo quince minutos de casa, ello nos permite perdernos por su arena tantas veces queramos sin importar el día de la semana en el que estemos...
Por fin el solecito hizo acto de presencia con unos cielos azules y brillantes. Un paseo por la orilla con los míos hasta toparse con los barcos anclados sobre el agua...
A la vuelta un refrescante baño, el primero del domingo, solos, como si estuviéramos en una isla desierta, la recompensa de madrugar, encontrarse la playa desierta, sin agobios ni ajetreos...
Aiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii preciosas, aunque últimamente me he convertido en apasionada amante de la montaña y los verdes campos, a pesar de los agobios del calor que ya no soporto como años atrás, sigo sintiendo predilección por el mar, con ese azul que me cautiva...
Esa arena que pisar...
Ese lejano horizonte brillante y tentador...
Con barcos flotando a destinos inimaginables...
Con la blanca espuma que arrastra cada ola hacia la orilla...
Y peces y gaviotas surcando las aguas...
He crecido cercana al Mediterráneo, mis padres nos llevaban muchos fines de semana al llegar el verano, he visitado montones de islas como destino predilecto en todas mis vacaciones y siempre que puedo me pierdo con los míos para gozar de semejantes paisajes...
No sabría vivir sin él, a formado parte de mi desde siempre y lo seguirá haciendo por muchos años más...
Estar cerca de él me hace sonreír...
Relajarme, olvidarme de todo...
Cerrar los ojos y dejarme llevar...
Sintiéndome en un especial paraíso de ensueño...Por cierto, fijaros al fondo tras de mi, empieza a llenarse del todo la playa, menos mal que hemos podido disfrutar de la soledad por unas cuantas horas...
Ante tan hermoso mar cercano a mi ciudad, ya solo me quedaría hacerme con uno de los magníficos apartamentos a pie de playa que se divisan tras de mi con terraza incluida. Aiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii como íbamos a disfrutar entre todas decorando cada rincón con toques marineros. ¿Sabéis qué chicas?...
Soñar es maravilloso y más en una tarde de martes repleta de calor...
¡Besitos veraniegos para todasssssssssssssssssssssssssss!