Me visualice en un castillo en la Provenza rodeado de lavanda y con los muros tapizados de Buganvilla de un rosa intenso... Con la absoluta certeza de disponer del tiempo a mi antojo... Y de poder dedicarlo a dar interminables paseos en el jardín, disfrutar de incontables lecturas en una butaca a pie de la chimenea, iniciarme en la cocina en un espacio absolutamente inspirador... En fin...
Hoy os mostramos una preciosa vivienda, que aunque no puede incluirse en la categoría de castillo, hubiese sido acogida como buena opción para invertir mi preciado tiempo, tendré que decirle al CUARZO que la próxima vez me muestre opciones más realistas, para no tirarme después de los pelos!!!
¡SED FELICES!
Fuente: Bjurfors