Separa tus prendas
Por más obvio que parezca este consejo, es algo esencial a la hora de lavar la ropa. Algo tan simple como separar las prendas blancas de las de color puede ahorrarte muchos pasos y no tendrás que preocuparte por tener que quitar manchas de ropa porque alguna prenda tiñó otra. Puedes separar tus prendas por el tipo de tela, para decidir cuáles lavar a mano o en lavarropas, cuáles son delicadas o si son más resistentes, etc.
Mira las etiquetas
Todas las prendas vienen con etiquetas, y por algo es ¿no crees? Préstale atención a las etiquetas de tu ropa, fíjate cuáles se pueden lavar en el lavarropas, cuáles son únicamente de lavado a mano, cuál es la forma de secado más adecuada, y si se pueden planchar o no.
Lavar a mano es necesario
Sabemos que puede resultar tedioso quitar manchas de ropa a mano, pero muchas veces es la mejor opción para cuidar tus prendas más lindas. Lava a mano la ropa de seda, algodón y lana con un jabón suave y sin fregar.
Consejos para lavar la ropa en el lavadora
Existen algunos consejos a tener en cuenta para que tus prendas no se arruinen al meterlas al lavarropas:
Usa el ciclo de lavado adecuado para cada tipo de prenda. Para la ropa blanca de algodón usa el ciclo normal, para las prendas de lana, lencería o trajes de baño usa el ciclo para ropa delicada. Para los tejidos más resistentes puedes usar un ciclo de lavado de temperatura alta.
Lava los jeans del lado del revés para evitar que destiñan. Cierra los cierres y los botones para que no se enganchen con otras prendas.
No sobrecargues el lavarropas. Esto es un impedimento para el lavado, ya que el jabón no llega a todas las prendas y, además, se arrugan demasiado. Coloca solo la cantidad de ropa necesaria en cada carga.
Trucos para lavar ropa blanca y de color
Una muy buena idea que va a dejar tus prendas blancas aún más blancas y radiantes, es poner una aspirina en el tambor del lavarropas al momento del lavado. ¡Verás que no falla! Por otro lado, para evitar que tu ropa de color se destiña, agrega al lavado una taza de sal la primera vez que laves tus prendas. ¡Esto hará que los colores se fijen en las telas y no volverán a desteñir!
Consejos de secado y planchado
El secado y el planchado de la ropa son casi tan importantes como el lavado. Hay que prestar atención a las etiquetas y decidir qué prendas secar en la secadora, cuáles al aire libre y cuáles se pueden planchar.
La ventaja de secar tu ropa al aire libre es que evita la aparición de moho por la humedad. Además, si estiras bien la ropa te vas a ahorrar el planchado.
Algunas prendas quedan mejor si se secan en la secadora, por ejemplo, las toallas y sábanas. Usa la secadora con cuidado para no arruinar tus prendas más delicadas.
Si vas a planchar la ropa, primero lee la etiqueta y corrobora que la prenda se pueda planchar. Es conveniente tener a mano un vaporizador para ir humedeciendo de a poco la tela antes del planchado, para obtener mejores resultados. Para la ropa con estampas, es preferible planchar del lado del revés y colocar un trapo entre la prenda y la plancha.
Cómo guardas la ropa es igual de importante
Casi tan o más importante que el lavado es cómo guardas tu ropa. Si tienes, por ejemplo, un vestido de seda que lavaste a mano suavemente pero después lo guardaste doblado en un cajón, es casi imposible que se mantenga en perfectas condiciones. Te damos algunos consejos para guardar tu ropa:
Dobla los suéteres en vez de colgarlos en perchas para que no se deformen.
Usa perchas de madera o con goma espuma. Las perchas de alambre o de plástico suelen estirar la ropa en la parte de los hombros.
Dale un poco de aire a tu ropa: no llenes de ropa tu clóset. Si apilas mucha ropa, las prendas se van a arrugar y las telas se pueden gastar.
Cierra los cierres de la ropa colgada para que no se enganchen otras prendas.
Dobla la ropa por las líneas de las costuras. Esto facilita la tarea y además reduce las arrugas.
Con estos consejos de lavandería vas a poder lavar y mantener tus prendas en perfecto estado por mucho tiempo. ¡Esperamos que puedas llevarlas a cabo!
Fuente: este post proviene de Decoarmonia, donde puedes consultar el contenido original.
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