A cambio de una cantidad de dinero, que varía en función de la superficie del trastero y que normalmente se abona de forma mensual, disponemos de un espacio donde guardar objetos que usamos poco y aquellos que, por sus dimensiones, dificultan su mantenimiento dentro de la vivienda.
Este es un concepto que existe en muchos países desde hace décadas, pero que en los últimos años ha comenzado a expandirse por todo el mundo, motivado por la idea de que las personas cada vez disponen de más cosas que se niegan a desechar o regalar y que no hacen sino irse acumulando.
¿Realmente es rentable alquilar un trastero?
Antes de nada hay que tener en cuenta que el acierto en la inversión depende directamente del volumen de pertenencias que tengamos que guardar. En primer lugar, es fundamental pensar si realmente estamos aprovechando el espacio de nuestra vivienda de manera óptima.
Después, debemos hacer un listado de todos los objetos que queremos guardar para, en función de eso, decidir la superficie que mejor se adapta a nuestras necesidades. Si no realizamos esta planificación previa nos encontraremos con que hemos alquilado un espacio demasiado pequeño o que, por el contrario, estamos malgastando el dinero en un trastero más grande de lo que realmente necesitamos.
Ventajas de alquilar un trastero
No hay que menospreciar las ventajas de alquilar un trastero. Nos ofrece la posibilidad de liberar espacio en la vivienda, sacar de casa aquellos objetos que solo utilizamos esporádicamente o en determinadas épocas del año y, lo más importante: nos permite mantener nuestras pertenencias debidamente protegidas, alargando su duración y vida útil.
Self Storage, una opción que va ganado terreno
Como alternativa al clásico alquiler de trasteros que se realiza a particulares, existen empresas especializadas en ofrecer soluciones de almacenaje a medida, por módulos.
Esta modalidad, conocida como Self Storage permite a particulares y empresas almacenar sus pertenencias de manera cómoda, flexible, segura y limpia durante el tiempo que éstos lo requieran.
Frente a los trasteros clásicos, los operadores de este tipo de instalaciones ofrecen un valor añadido al cliente.
En qué consiste este tipo de alquileres
Cuentan con unidades de diferente tamaño y brindan asesoramiento personalizado para ayudar al cliente a decidir los metros cuadrados que necesita. Disponen de sistemas y mecanismos para garantizar la máxima seguridad en todas sus instalaciones.
Además, la renta mensual incluye el acceso al trastero las 24 horas y los 365 días del año. De igual modo, algunas empresas de Self Storage cuentan con un aparcamiento propio para facilitar las labores de carga y descarga y, de manera complementaria, también suelen ofrecer material de almacenaje y servicios de mudanza.
Si has pensado en alquilar un trastero no está de más que valores la opción de decantarte por el Self Storage, que te permitirá realizar una inversión inteligente pagando sólo por el espacio que necesitas, durante el tiempo que tú decidas.
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