Es un estilo cálido, elegante y acogedor, que transmite belleza, respeto y tolerancia por otras culturas. Está formado por elementos decorativos trabajados de forma artesanal, según la tradición de cada zona de origen.
Tejidos
Los más utilizados son los naturales como el lino o el algodón, trabajados de forma artesanal, utilizando tintes naturales procedentes de la tierra o especias.
Fotografías
Decorar las paredes con fotografías realizadas en nuestros viajes, es un buen recurso para darle el toque étnico a la decoración. Pero si no tienes la suerte se haber viajado a Sudáfrica, siempre se puede recurrir a webs de láminas.
Alfombras orientales, baúles, cestas de bambú, máscaras africanas, totem de antiguas civilizaciones, tapicería artesanal como pufs,
Madera
Es otro de los materiales más utilizados e igualmente tratado de forma artesanal. En algunos casos se aprecia cómo se han dejado algunas zonas sin terminar de pulir, algo imperfectas, que hace cada pieza sea diferente.
Como veis, la madera puede estar combinada con diferentes tipos de metal: estaño, cobre o latón.
Papel pintado
Para rematar el look, podemos vestir nuestras paredes con papeles pintados que simulen estampados animales o incluso estar en plena selva.
¿Que te ha parecido?
¿Te gusta el estilo étnico-africano?
¡A mi me encanta!
Fuente: este post proviene de El mirador de Laura, donde puedes consultar el contenido original.
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