Al reformar un loft, casi siempre nos encontramos con un estilo arquitectónico muy especial. Se trata de un espacio completamente abierto y sin muros divisorios. Que normalmente (al menos originalmente) pertenecía a una construcción con un uso diferente al actual. A pesar de que actualmente existan pisos que ya han sido diseñados a propósito como lofts, la idea original se mantiene. Y en muchos casos son apartamentos en los que podemos ver por ejemplo las vigas de concreto de la construcción. Y todo ello influye en la forma diferente en que este tipo de pisos se decoran y se amueblan después de realizar los acondicionamientos necesarios para reformar un loft.
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Marcar diferentes áreas en tu espacio diáfano
Una primera consigna muy importante es considerar el espacio como algo fluido. No habrá muros, pasillos o puertas que dividan los espacios formalmente. Pero sí que habrá que delimitar áreas funcionales. Sin por ello romper el equilibrio que existe en el espacio en su conjunto. Ello hace que todos los elementos puedan convertirse potencialmente en divisiones entre áreas. Un aliado excelente es valerse de los propios muebles como divisiones. Libreros escalonados, sofás, guardarropas, cada mueble puede convertirse en el símbolo de que entramos a otra área funcional dentro del piso. Y también pueden ayudar a brindar privacidad y convertirse en puntos focales de la decoración.
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Otra forma excelente de marcar la diferencia de espacios es utilizar biombos. Estos elementos pueden también ser herramientas excelentes de decoración. Y dar un toque que reafirme el estilo que hemos escogido. Pero hay que utilizarlos con medida y sin abusar al reformar un loft. Un loft es diferente, es un espacio abierto y respetar esta idea es lo que permitirá darle un estilo decorativo inigualable. Y de cierto aire neoyorkino, puesto que fue en esta ciudad americana en la que se empezaron a usar espacios abiertos como pisos residenciales. Lugares que previamente tenían un uso diferente como fábricas o almacenes.
Antes de pasar a ver opciones y elementos concretos en la decoración no olvidemos un elemento excelente. Que puede delimitar espacios al reformar un piso tipo loft: la pintura. Si bien el hecho de pintar no va a dividir físicamente un área de otra. Pero sí puede ser una herramienta que visualmente ayude a distinguir dónde acaba la cocina y en dónde empieza el salón, por ejemplo. La idea es dar una identidad a cada espacio de la casa y el color puede ser una forma excelente de hacerlo.
Reformar un loft: Un look industrial
La primera elección de decoración al momento de reformar un loft es sin duda el estilo industrial. Es la alternativa natural para decorar un espacio que solía tener un auténtico uso de este tipo. En ocasiones, tenemos ayuda de la propia estructura física del piso. La existencia de vigas de hormigón o hierro que sean aún visibles. La no-presencia de un acabado cerámico pero un suelo en concreto pulido por el uso. Son algunos elementos que pueden inclinarnos hacia una decoración industrial y hacerla más fácil.
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Otro elemento que puede resultar ideal para aplicar un estilo industrial en un loft es sin duda la elección de materiales. Metales y acabados en granito y piedra pueden ayudar a dar ese look de fábrica estilizada que define al estilo industrial. En la cocina, por ejemplo, se puede elegir utilizar un color oscuro para el mobiliario y que la encimera sea en granito. Guardar viejas paredes en ladrillo con un acabado en bruto también puede ser un factor que defina el estilo industrial.
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En el mobiliario de baño y cocina (e inclusive en libreros, repisas y armarios), además de la madera puede utilizarse también algún material más tosco. Como son los ladrillos o piezas en hormigón, muy utilizados al reformar un loft. Una barra que divida la cocina del salón, el mueble del televisor, etc. Todos estos elementos pueden beneficiarse del uso de materiales que tendrían su lugar en una fábrica. A ello hay que sumar colores en una gama de blanco, grises y negro. Con pequeños acentos de colores oscuros y no brillantes. En los puntos focales de la decoración de cada área del loft.
Un loft vintage
Esos mismos muros crudos en concreto o ladrillo, pueden adaptarse a otro estilo decorativo. Aquel que puede evocar los lofts de Brooklyn: el estilo vintage. La introducción de mobiliario de los años sesenta o setenta del siglo pasado o un toque de color sepia o beige. Todo ello puede convertir a un piso tipo loft en un espacio cálido y lleno de contrastes. Una ventaja que posee el estilo vintage es que muchos de sus elementos y tonos se casan muy bien con la sensación urbana y moderna de un loft.
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Es interesante el uso de estantes flotantes en madera, por ejemplo, con sillas y sofás diseñados a modo de los años sesenta o setenta. Combina de forma excelente con los muros brutos en hormigón y ladrillo. Que pueden encontrarse en un loft que solía formar parte de una nave industrial. Enriquecer estos elementos con detalles como una vieja valija. Combinada con estantes con cestos o cajas decorativas para guardar la ropa. O con lámparas en colores psicodélicos, que darán un aspecto contrastante e intensamente personal al espacio.
Diseña tu propio estilo
Claro que un estilo nórdico o uno minimalista también se pueden aplicar de forma excelente al reformar un loft. O si se trata de uno rural, que provenga de una masía o un antiguo granero, un estilo rústico le puede quedar como anillo al dedo.
Lo importante es no omitir los elementos que hacen que el piso guarde su personalidad de haber sido algo más que una nave de cuatro paredes. Ese aire industrial que viene del origen del propio piso es lo que hay que explotar. Para hacer de un loft un espacio agradable pero también cargado de un estilo propio intenso y estéticamente muy agradable. En nuestro portal Vip Reformas podrás encontrar los expertos que necesites cerca de tu hogar para darle a tu loft un estilo inigualable.
Este artículo es un contenido original del blog de VipReformas.es