Y todo ello de una forma muy sencilla y económica que evitará que tengas que gastar dinero en productos de limpieza o en la compra de nuevos accesorios de baño.
En esta ocasión ponemos a tu disposición dos remedios para unas toallas suaves que podrás elaborar usando bicarbonato de sodio o vinagre blanco, unos productos que probablemente guardas en tu despensa y que, de no ser así, podrás adquirir en cualquier supermercado por un módico precio.
Remedio casero de bicarbonato de sodio
El bicarbonato no solo es capaz de dejar las toallas tan suaves como la seda, sino también de eliminar las bacterias debido a su poder limpiador y desinfectante.
Ingredientes
2 cucharadas de bicarbonato de sodio
Pasos a seguir
Cuando introduzcas las toallas en la lavadora recuerda agregar dos cucharadas de bicarbonato al agua del aclarado.
Si llevas a cabo esta sencilla operación cuando veas que tus toallas se han vuelto un poco ásperas podrás recuperar su sedosidad de una forma muy práctica y económica.
Remedio caseros de vinagre blanco
El vinagre blanco también es rico en propiedades antibacterianas y en sustancias capaces de suavizar las toallas al máximo sin estropearlas.
Ingredientes
Un vaso de vinagre blanco
Agua
Un barreño que sea lo suficientemente grande como para poder introducir las toallas
Pasos a seguir
Vierte el agua dentro del cuenco y agrega el vinagre blanco.
Coloca la toalla en el interior del recipiente en el que has vertido el líquido y deja que repose durante toda una noche.
A la mañana siguiente lava la toalla del modo habitual usando el gel que emplees a menudo.
Al secarse estará tan suave como la seda.
Descubre más trucos caseros para cuidar los accesorios de baño en el post titulado Limpiar el baño con limón y sal.
¿Qué opinas sobre estos remedios para unas toallas suaves?
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