A la tendencia de vestir las mesas de manera ecléctica, con piezas diversas de
distinta procedencia, se ha sumado la de dar toques de colores actuales a
las antiguas servilletas de damasco con iniciales, consiguiendo mesas
llenas de magia y color que nos hacen evocar preciosos bodegones.
En casa conservamos mantelerías de damasco heredadas de las tres titas
solteras que criaron a mi madre, tres amplios ajuares bordados con las
respectivas iniciales que mi madre se ha negado a tener guardados y ha
utilizado frecuentemente.
Algunas mantelerías se han estropeado por el uso y de ellas quedan únicamente
servilletas sueltas que he querido actualizar dándoles un toque de color.
Aprovechando los sobres que me sobraron de unos DIY que realicé hace
tiempo con Tintes Iberia, he dado color a dos servilletas.
Mezclando azul celeste con verde pistacho conseguí un color azulón muy
actual que aporta un aspecto totalmente renovado a una de las servilletas
antiguas.
Siguiendo las instrucciones de los tintes se consigue un resultado uniforme y
duradero. Es conveniente planchar la prenda después de recibir el tinte para
fijar aún más el color.
Yo planché la servilleta cuando aún estaba bastante húmeda lo que, por otro
lado, favorece el planchado de este tipo de piezas de antiguo hilo de holanda
natural.
Añadiéndole un sobre de tinte rojo a la anterior mezcla azul/verde conseguí
un tono rosado con el que dí color a una servilleta adamascada que adquirí
en un mercado de pulgas de París.
Me encantó el resultado y monté una pequeña mesa para dos utilizando
como base el mantelito de damasco en tono celeste con iniciales bordadas
que también traje como souvenir de París.
En un momento y sin apenas coste he conseguido dar un aspecto renovado y
actual a estas dos servilletas que alegrarán cualquier mesa.
Un DIY frugal para compartir en los findes de Marcela Cavaglieri donde me
voy rauda a empaparme de más inspiración.
¡Feliz fin de semana pre-Pascua!