Te traigo cinco trucos básicos que te costarán muy poquito dinero (pongamos como mucho 200€) y que transformarán tu apartamento en un auténtico "primera línea de playa".
1. Lo primero, hazte con una mosquitera, grande, y pónla donde sea, ¡menos en la cama! (Es que dan mucho calor y si no tienes una enorme plaga de mosquitos no la necesitas). Sobre el sofá, en un rincón del salón, en una zona de paso, en el cuarto de los niños, o en tu pequeño balcón.
2. Segundo, vete al vivero y cómprate una gran planta. Dos opciones, o una enorme planta en maceta de cerámica, o una pequeña pero con hojas que cuelgan, tipo ficus o poto, que se conservan muy bien, siempre están verdes y tienen unas hojitas ideales.
3. Tercero: convierte al blanco en protagonista e introduce algún contraste; de verdad, es una apuesta segura. Si tienes miedo de que resulte aburrido, atrévete con los colores intensos sólo en los detalles (cojines, vivos, complementos).
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. Cuarto: rayas, y más rayas. Mejor anchas, pero nos valen también las rayas estrechas. Son el estampado playero por excelencia. Las rayas que recuerdan a los toldos playeros, a las toallas de la costa azul, a las hamacas portuguesas. ¡Unos cuantos cojines rayados hacen maravillas en cualquier ambiente aburrido!
5. Quinto: siguiendo con las rayas... Si no quieres más cojines, y de verdad tienes un punto arriesgado... ¿Por qué no pintas una pared con rayas? ¿O utilizas un panelado de madera para crear las rayas horizontales? El mejor truco siempre es arriesgar!!