Los días se van haciendo cada vez más largos, el tiempo mejora y se disfruta mucho más en la calle. Todo esto va en aumento con el final de curso escolar y con la cercanía del verano. Y algo que, a priori, es positivo para muchas personas puede no serlo para otras si todo el ruido de fuera se cuela en casa.
Mucho se habla de la contaminación acústica en las grandes ciudades, pero quizá no demasiado sobre sus consecuencias y sobre cómo poder evitarlo.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) relaciona este problema, sobre todo, con el tráfico rodado. El tráfico en los lugares en los que existe mucha movilidad, como colegios, hospitales, estadios de fútbol o grandes zonas peatonales pueden provocar niveles de ruido que molesten e interrumpan la actividad habitual de una casa o de una oficina, impidiendo la concentración o la conciliación del sueño, algo que no es baladí.
Las fronteras con el ruido están representadas por las puertas, pero, sobre todo, por las ventanas, que son el contacto directo con el exterior. En este contexto es fundamental contar con un buen vidrio de aislamiento acústico que ayude a atenuar los decibelios que vienen de fuera.
Una buena opción es el doble acristalamiento SGG CLIMALIT PLUS®. Esta solución cuenta con grandes ventajas, entre las que se encuentra la atenuación acústica, pero también el aislamiento térmico reforzado y la proyección de luz natural sin calor.
Pero si además queremos aumentar la atenuación acústica tenemos que poner SGG CLIMALIT PLUS con STADIP SILENCE® de esta manera el confort en el interior del hogar está completamente garantizado, especialmente en cuanto a niveles de ruido, permitiendo un buen descanso y el desarrollo de la actividad normal sin interrupciones.
Según algunos estudios, casi el 90% de la vida de las personas transcurre en los interiores. En esta época que, además, se pasa más tiempo en casa, merece la pena invertir en el confort en el hogar en todos los sentidos, ¿por qué estar mal cuando es tan fácil estar bien?.