Este estilo se ha popularizado mucho en los últimos años y su clave fundamental es lograr el equilibrio entre lo antiguo y lo contemporáneo. No se trata de trasladarnos a vivir a los años 40 o 50, sino de combinar muebles y objetos de otras épocas con las comodidades del siglo XXI, y adaptar piezas clásicas a las necesidades actuales sin que pierdan su esencia.
Combinación de diferentes épocas
La primera clave a tener en cuenta es que el vintage no es un estilo puro, sino que toma elementos de diferentes épocas y los combina entre sí. No hace falta un cambio radical de todos tus muebles, sino que puedes comenzar por introducir este estilo a través de elementos decorativos, como baúles, maletas antiguas, lámparas colgantes de araña o grandes espejos con marcos cromados.
Ambientes & Decoración
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Colores y estampados
Los colores generalmente más usados en este tipo de decoración son los tonos neutros y suaves, así como los pasteles, marrones, rojizos y rosas. Puedes conseguir un toque rompedor mezclándolos con un color más intenso y atrevido, incluso con un tono flúor, para lograr una combinación de estilos vistosa y que no dejará indiferente.
Los estampados de flores son otro de los puntos clave de este tipo de decoración y puedes introducirlos fácilmente a través de cojines o cortinas. Una buena idea es también introducir estampados en una parte de un mueble, por ejemplo, los cajones de una cómoda.
Papel pintado
Para ir un paso más allá, atrévete con el papel pintado en alguna de las paredes de la estancia, con lo que lograrás un toque diferenciador.
Y si tanta flor no te convence, puedes conseguir un estilo muy vintage para tus paredes introduciendo ladrillos, ya sea también a través del papel pintado, o bien mediante ladrillos decorativos especiales para este fin.
Reciclando muebles
El estilo vintage es muy versátil y te permitirá también muchos juegos con el mobiliario. Así, puedes optar por recuperar muebles antiguos, reciclarlos y darles una nueva vida. No se trata de que nuestra mesa parezca sacada directamente del basurero: prueba, por ejemplo, a restaurarla pintándola de un color intenso para darle un toque original y divertido, o tapiza con telas modernas un sillón de los 70 para tener un mueble completamente único y original.
El proceso también puede ser el inverso: muebles y objetos nuevos, pero con un toque retro. Puedes introducir muebles de madera, hierro o mimbre con acabados wash y decapados, que les dan a la vez un toque envejecido y personal.
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