Estamos a un paso del verano y ya notamos que la temperatura ha subido en estas últimas semanas. Para que no nos pillen desprevenidos los meses más calurosos del año, es fundamental preparar la casa para el calor ahora, con ideas que la llenen de aire fresco, haciéndola más confortable. Tienes a tu alcance sistemas naturales y técnicos. La combinación de ambas es la fórmula perfecta para encontrar ese ansiado equilibrio térmico. Pero si quieres ahorrar en energía y que eso redunde en tus facturas a final de mes, te proponemos una batería de ideas fáciles… ¡y que funcionan!
Preparar la casa para el calor y ahorrar dinero
¿El gasto energético se te dispara cada verano? Empieza por la solución más eficaz: aisla tu casa. Una vivienda bien aislada reduce en casi un 40% los gastos en aire acondicionado y otros sistemas. Revestir paredes, suelos y techos con aislantes minerales, con otro tabique o con una fachada ventilada garantiza las mínimas pérdidas energéticas. Pero también es una inversión económica elevada que requiere obra. Por eso, si quieres preparar la casa para el calor sin meterte en reformas importantes, algo que aún no tienes previsto, puedes echar mano de recursos eficaces y que solo requieren un pequeño desembolso económico. Toma nota.Ventilación cruzada, muy efectiva
Puedes beneficiarte de un agradable flujo de aire que alivie el bochorno estival, simplemente, abriendo las ventanas. Cuando éstas están dispuestas en fachadas opuestas, crea corrientes. Hay estudios que afirman que este tipo de ventilación es la mejor, no solo para renovar el aire viciado de la casa, sino también para reducir la carga de patógenos y minimizar la propagación de virus en un ambiente cerrado.Toldos, capotas y estores, los mejores aliados
Todos estos elementos son magníficos sistemas de protección frente al calor. Además, los nuevos diseños de toldos y capotas están fabricados con tejidos técnicos, que además de reducir la temperatura debajo y detrás del toldo, permiten una mayor claridad a través de la lona, un alto nivel impermeabilidad y son ignífugos.Asimismo los estores enrollables de screen (tejido microperforado) son una buena propuesta, ya que filtran los rayos solares pero no impiden la entrada de luz. Su poder de absorción es mayor o menor en función del grosor y color del tejido.
Refuerza o cambia las ventanas por modelos aislantes
Si quieres preparar tu casa para el calor, evita que se cuele a través de ellas: quizás tus ventanas sean los puntos más vulnerables de en tu casa. Es una inversión económica importante, no cabe duda, pero se recupera en pocos años con el ahorro energético que ello supone. No hay mejor sistema de aislamiento que unas buenas ventanas con buenos perfiles (con rotura de puente térmico, si se trata de carpinterías de aluminio). Pero los vidrios son también fundamentales. Elige doble cristal con cámara aislante y que sean vidrios de baja emisividad y dotados con tratamiento de filtro solar. Verás cómo lo notas dentro de tu hogar.Rodéate de vegetación en tu casa
Otra propuesta de probada eficacia son los plantas. Ayudan a refrescar cualquier ambiente y forman una barrera contra el calor. Variedades de porte medio, con hoja verde son auténticos humidificadores naturales en tu terraza.Si dispones de una vivienda independiente, tipo chalé, los árboles de hoja caduca alrededor de la casa o en la fachada que más calor reciba proporcionarán sombra refrescante en verano y no impedirán en invierno el paso de la luz. También los jardines verticales creados con plantas tapizantes -hiedra, ficus plumilla, parra virgen- recubriendo los muros son un aislante natural de primer orden. Otros elementos que ayudan a regular las subidas térmicas son los porches y celosías decorados con plantas y dispuestos cerca del acceso al edificio.
Fachadas blancas o de colores claros reflejan el calor
Lo de encalar las casas no es algo nuevo. En la cultura popular siempre ha sido una costumbre muy arraigada, especialmente en zonas muy calurosas del país, ya que el color blanco hace diminuir la temperatura de muros y paredes al reflejar los rayos del sol. Es una costumbre tradicional preparar la casa para el calor pintando de blanco la fachada. Este sencillo gesto reduce al máximo la absorción de la radiación solar.Usa una pintura al agua, especial para soportes de exterior y que deje transpirar el muro. En el caso de que quieras encalar a la antigua usanza, dispones en comercios especializados de novedosos productos ya preparados, nada engorrosos de utilizar, como las lechadas de cal y las jabelgas. Son de muy fácil aplicación, duraderas y eficaces.
Para disfrutar de un ambiente fresco durante el verano, nada como preparar la casa para el calor antes de que se eche encima y no dejándote un dineral en aire acondicionado. ¡Pon manos a la obra!