Los que nos leéis a menudo sabéis que es cierto: nos encanta el método KonMari. Eso sí, diremos en nuestra defensa que nos gusta tanto por razones muy fáciles de explicar. Y es que esta revolucionaria forma de ordenar nuestro hogar se ha convertido en una premisa necesaria a la hora de hablar de soluciones fáciles para el día a día. Y algo que nos atrae aún más: este método organizativo está especialmente dedicado a los que disponen de pisos y casas pequeñas. Si también es tu caso, te invitamos a que te quedes con nosotros. ¡Hay algunas cosas que quizá todavía no sepas de este manual de orden nacido en Japón!
Orden + limpieza como potenciadores de felicidad
Si leemos este título así, descontextualizado, podremos pensar: ¡Qué exageración! Pero Kondo va mucho más allá de un mero gesto al doblar la ropa o de deshacernos de ciertos elementos obsoletos en nuestra decoración. Por supuesto, no podemos hablar de orden sin hacerlo antes de limpieza. Por ello, asegúrate de que has limpiado a fondo cada rincón de tu casa antes de empezar con la gran reforma organizativa. ¿A que ahora va siendo más fácil establecer la criba para saber con qué te quedas y qué es eso de lo que te desprendes? Después de una limpieza a conciencia, llega el momento del orden. Aquí hay dos premisas que pueden ayudarte: ''no te quedes con lo que no te dé alegría'' y ''categoriza y triunfarás''.El primer eslogan es claro: solo deberíamos conservar lo que nos proporcione satisfacción. Así, nos será más fácil donar, reciclar y deshacernos del resto de trastos. Y de las categorías ya te hemos hablado en otros capítulos: se trata de dividir o etiquetar en base a colores, texturas, estaciones, uso (más o menos habitual). En definitiva, ¡lo que tú consideres que es una etiqueta!
Cómo evitar la típica montaña de ropa y otros 'vicios'
Kondo nos propone reflexionar sobre nuestros malos hábitos, para después adquirir el compromiso del cambio. No vas a ser la persona más ordenada del mundo en cuestión de dos días, pero si aplicas el sentido común, la constancia y el esfuerzo día a día, llegará el momento en que doblar la ropa te parecerá algo muy lejano a un deber. ¡Créenos! Hay muchas personas que gracias al método KonMari se confiesan verdaderos fanáticos del orden ¡y disfrutan poniéndolo en práctica en todas las facetas del hogar!Ahora bien, leyendo a Marie Kondo es fácil elaborar la primera crítica: ¿El orden no debería ser algo equilibrado y que no llegara a obsesionarnos? Kondo asegura que una obsesión es algo negativo, y que por ello su método se aleja de ambos conceptos. Además, sostiene que llevar a cabo un hábito que es saludable para ti y para tu entorno (en este caso para todos los habitantes de la casa) no puede ser en ningún caso negativo, aunque se haga con intensidad. Mientras 'te piensas' qué opinas sobre esto, queremos contarte los 6 consejos más importantes para mantener tu ropa a raya. ¿Te vienes?
Fuente: Jeshoots/Pixabay
- Elige un momento 'feliz' para hacerlo
No, no es una frase hecha; el método insiste en que, si no estamos de humor o tenemos un mal día, no deberíamos emplear esas horas en un proceso que debería ser feliz, de inicio a fin. De lo contrario, es imposible que el cambio a largo plazo sea posible. ¡Necesitamos muchos ratos 'felices' que, unidos, nos lleven a nuestro objetivo final: ¡ser ordenados para siempre! - Hazlo todo de una vez
Aunque te lleve horas e incluso días. Si te pones el propósito firme de ordenar y doblar toda tu ropa, ¡has de finalizarlo! Kondo cree que la sensación de satisfacción después del esfuerzo invertido repercutirá positivamente en el cambio a largo plazo.- Dobla y guarda ¡en vertical!
Esta joven decoradora japonesa ha instaurado hasta una forma particular de doblar la ropa según las prendas que tengamos. Todas estas microformas tienen en común el mismo criterio: doblar siempre de tal forma que ocupe el menor lugar posible. Haz como proponen los tutoriales que abundan en Youtube. Hemos encontrado uno de la Youtuber Elena G que lo explica muy bien. Aunque al principio te 'choque' esta curiosa forma de doblado de prendas, te empezará a gustar cuando veas que ocupas mucho menos espacio ¡y además tus prendas se ven mucho mejor! (Por lo que no tendrás que desdoblarlas para ver cuáles son)Via Youtube/Elena G
- Conserva prendas que te teletransporten a momentos felices
Mientras estás doblando tu ropa, piensa en algo: ¿qué sensaciones te produce tocar ese cariñoso tejido? ¿Y esa blusa que hace tanto que no te pones?, ¿no es la misma que llevabas en tu graduación? Ese día fuiste feliz... ¿por qué no darle más oportunidades? Como ves, esta es la sencilla clave: asociar prendas a momentos felices.- Planchar antes de doblar y guardar
Puedes hacer que el proceso sea más alegre todavía si decides planchar tus prendas, e incluso perfumarlas, antes de guardarlas en un cajón, estante o caja. Es una forma de completar el trabajo y de que, cuando vuelvas a ver estas prendas, te alegres por partida doble. ¡Olerán de maravilla!- En cajas... ¡también en vertical!
Un punto clave a la hora de elegir, doblar y guardar escrupulosamente nuestras prendas es preguntarte: ¿voy a utilizarlas de aquí a uno o dos meses? Si la respuesta es 'No', Marie Kondo te invita a que guardes esos vestidos, camisas o pantalones en cajas de almacenaje no muy lejos de tu dormitorio, pero lo suficiente para tener un espacio libre, despejado y que únicamente sea ocupado por cosas necesarias. De esta forma, se asocian de nuevo dos términos de los que Kondo habla a menudo en su manual: los conceptos 'necesario' y 'espacio'. Si un espacio está recargado estará 'contaminado' y las energías positivas no fluirán igual.Y después de la ropa: libros, discos, papeles, fotos, recuerdos...
No queremos que se nos olvide algo importante, antes de iniciarse en el método KonMari, y es que respetar los espacios, manteniéndolos lo más diáfanos y despejados posible, te vendrá 'de perlas' para la tarea de doblar la ropa de todas las temporadas. Además, ¡no dudes en hacerte con unas cuantas cajas vacías antes de empezar a doblar y guardar la ropa!Por último, otro consejo general: Marie Kondo asegura que siempre viene bien empezar por ropa y calzado porque ambas son las partes más laboriosas y difíciles en cuanto al orden. Pero ¡no te distraigas!, si has cumplido algunos o todos estos puntos, ya puedes considerarte un seguidor más de esta filosofía del orden en el hogar.
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