¿Cuándo fue la última vez que revisaste las condiciones de tus contratos del gas, de la electricidad o de la telefonía? ¿Y de los seguros? ¿Crees que podrías estar pagando de más por tu seguro de hogar? Hoy nos vamos a centrar en este último punto, vamos a ver qué debes tener en cuenta a la hora de firmar los seguros de hogar para que pagues lo estrictamente necesario.
Cómo conocer el precio de un seguro
Antes de nada debes tener dos conceptos muy claros a la hora de elegir un seguro para tu vivienda:
Lo barato sale caro. No escatimes, no se trata de pagar poco sino de pagar lo justo, porque los seguros baratos no te van a proteger lo suficiente.
No hay que pagar de más. No es necesario protegernos de cosas innecesarias, es decir, no hace falta gastar un dineral para encontrar el seguro que más se adapte a nuestras necesidades.
Dicho esto, para calcular el precio de un seguro, las compañías tienen en cuenta una serie de parámetros que varían en función de las características del edificio, del inmueble y de su propietario. Por ejemplo, estos son algunos de los aspectos que se valoran:
-Tipo de edificación: piso, chalet, adosado o pareado.
-Características: ubicación, año de construcción, tamaño, etc.
-Tipo de contrato: en propiedad, en alquiler, primera vivienda, segunda residencia...
-Seguridad: dispone de puerta blindada, cámaras de seguridad, alarma, vigilancia 24 hrs., etc.
-Continente y contenido: si se desea asegurar solo la vivienda, asegurar el mobiliario y los objetos o asegurar ambas cosas.
La forma más sencilla de disponer de un presupuesto es utilizar una calculadora de seguros de hogar, que se puede utilizar rápida y cómodamente desde cualquier dispositivo móvil y, así, en apenas dos minutos, podremos conocer el precio de nuestro seguro.
¿Qué debo tener en cuenta antes de contratarlo?
Lo primero, distinguir entre el continente (que es la vivienda en sí) y el contenido (son los bienes, todos los objetos que están dentro del inmueble), ya que tendremos que elegir qué cobertura deseamos contratar.
Después, tendremos que valorar correctamente ambas cosas para saber qué capital deseamos asegurar. De esta forma, para calcular el continente tenemos qué pensar cuánto costaría reconstruir la vivienda. Respecto al contenido, se recomienda anotar el valor real más aproximado de lo que tenemos en el interior de la vivienda, es decir, pensar cuánto valen los muebles, los electrodomésticos, la ropa, las joyas, obras de arte... todo.
También conviene saber que los seguros de hogar cuentan con otras coberturas muy importantes, como la de responsabilidad civil (que nos protegerá en el caso de que causemos daños a terceros) o la defensa jurídica (cubre los costes de las reclamaciones que hagamos a terceros), así como otros servicios opcionales, tales como reparaciones y bricolaje o cobertura en caso de robo en la calle.
Para no pagar de más, debemos comparar distintas ofertas disponibles en el mercado. Lo cierto es que gracias a Internet, en tan solo unos minutos podremos tener toda la información a mano y decidir cuál nos conviene más. También, para lograr este objetivo prescindiremos de coberturas innecesarias y tendremos en cuenta si ya tenemos cubiertos ciertos apartados con otros seguros, como el de la comunidad de vecinos.
Y tú, ¿estás convencido de que no estás pagando de más por tu seguro de hogar?