Disponer de un trastero es siempre una gran ayuda para mantener el orden en tu hogar. Te diré más, es casi imprescindible dependiendo del espacio de almacenamiento de tu casa. ¿Qué hacer con bicicletas, adornos navideños y otros objetos (que no trastos) cuyo uso no es diario ni siquiera habitual?
La solución es un trastero bien organizado. Si no dispones de uno propio existen guardamuebles en Madrid, Barcelona y en la mayoría de ciudades de cierto tamaño entre los que puedes elegir el que más se adapte a tus necesidades reales.
¿Qué guardar en el trastero?
Quizá el titulo debería ser “¿Qué NO guardar en el trastero?”. Y la respuesta está clara: trastos.
Antes de ordenar y organizar tu trastero debes tener claro cuáles son tus necesidades. Es decir, qué vas a guardar en él. Piensa en esos objetos que restan espacio en tu casa en el día a día pero son necesarios en determinados momentos del año. Podemos estar hablando de bicicletas, esquíes, tablas, adornos de Navidad, recuerdos importantes, quizá algún mueble.
No cometas el error de meter en tu guardamuebles o trastero todo aquello con lo que no sabes qué hacer en espera de encontrarle alguna utilidad algún día. Lo más probable es que todos esos (ahora sí utilizo la palabra) trastos, terminen en el olvido.
¿Cómo organizar el trastero?
El trastero debe ser un lugar cómodo y accesible. De nada te servirá tener un espacio de almacenamiento lleno de cosas sin ningún tipo de orden y en el que apenas te puedas mover. Piensa en esos trasteros abarrotados y oscuros con montañas de objetos amontonados en los que la sola idea de buscar algo se plantea como un trabajo pesado y con pocas posibilidades de éxito. De eso es de lo que tienes que huir.
Así que lo primero que tienes que hacer a la hora de empezar a organizar tu guardamuebles es pensar en una buena iluminación y en un espacio central que te permita moverte sin problemas por su interior.
Ya tenemos la base. A partir de ahí deberás decidir si prefieres guardar tus objetos en armarios o en estanterías, dependiendo del uso que le vayas a dar a tu trastero y de tus necesidades. O tal vez una combinación de ambos. Para ello debes tener claro qué necesistas realmente guardar en tu trastero; si son objetos de gran tamaño o peso, las estanterías serán la mejor opción. Tanto armarios como estantes deben ser resistentes y seguros, preferiblemente anclados a la pared.
No coloques estantes que vayan desde el suelo hasta el techo salvo que este sea bajo. Las zonas demasiado altas además de tener difícil acceso resultan poco prácticas.
Tampoco utilices armarios o baldas con mucho fondo. Los objetos que sitúes en la parte trasera quedarán escondidos y te obligarán a vaciar todo el hueco para acceder (y poder ver) lo que hay en el fondo. Lo ideal es tener todo a la vista y al alcance de la mano.
Si utilizas cajas, identifica con etiquetas su contenido de manera que con un solo golpe de vista puedas localizar aquello que buscas. Utilizar cajas transparentes es también una buena opción. Si es posible, elígelas herméticas para evitar que entre el polvo.
Coloca los objetos más pesados en la parte inferior y los más ligeros en las estanterías más altas. Del mismo modo, coloca los objetos de más uso en lugares con mayor accesibilidad o a la altura de la vista.
Por último, mantén tu trastero limpio y ordenado para detectar y evitar posibles humedades o insectos. Imágenes: Pinterest
Fuente: este post proviene de Nordic Treats, donde puedes consultar el contenido original.
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