Es lo que a mí me pasa con los sofás modulares de grandes volúmenes. Llevo meses viéndolos en muchos espacios. Al principio me pareció una tendencia poco “popular”. Poco practicable para casas convencionales. Pero la verdad es que a fuerza de ver imágenes y opciones diferentes, he llegado a la conclusión de que hay que prestar mucha atención a este producto.
Los sofás modulares pueden ser realmente prácticos, por su versatilidad a la hora de crear composiciones. Además, si os gusta el estilo relajado y natural, son ideales para salones y espacios informales. Se puede modificar la distribución de un salón en cuestión de minutos. ¿Os imagináis? Una distribución ideal para una tarde de peli en familia, que al minuto se adapta para recibir invitados. Y que después se puede distribuir en forma de L para dejar un espacio despejado. ¡Genial!
La verdad es que son piezas muy modernas, que marcan un estilo muy personal en los espacios. Un salón con sofás modulares es un espacio con personalidad (lo que hay que hacer es saber combinarlo, claro).
Además, de los modelos de diseño, podéis encontrar este tipo de muebles en tiendas low cost. Yo he encontrado este modelo en venta de muebles online. Se trata de una composición modular que puede encajar en cualquier parte y que se vende en distintos acabados, con un precio de unos 140 euros. Una composición de estas piezas puede ser ideal para crear un espacio original, ¿no os parece?
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