Siempre me han gustado los antes y después y últimamente con la obsesión de la reforma de la #casamya no hago más que buscar cambios y disfrutar aún más de lo maravilloso que es el mundo de la decoración. Un mundo que siempre me ha apasionado. El otro día haciendo limpieza encontré una redacción del instituto donde contaba porqué elegía estudiar interiorismo. Pues con 14 años, ¡¡lo tenía muy muy claro!!
Hoy os enseño un antes y después de una cocina que me puede gustar más. Los propietarios de la casa se han encargado de todo, un trabajo que ha durado varias semanas pero ha valido mucho la pena.
Los muebles no los han cambiado, les han dado un nuevo look pintándolos de blanco la parte de arriba y de negro los muebles de abajo. La idea de combinar colores en los muebles de la cocina cada vez me gusta más y en este caso han aportado más luminosidad y ligereza al espacio de la cocina. También han cambiado la encimera y ahora tienen una de madera preciosa. Han puesto unas baldas para tener los botes de cocina y decoración a la vista pero lo que más me ha gustado es la malla metálica para colgar accesorios.
Os dejo con las fotos para que disfrutéis de este gran cambio. ¡Qué paséis un buen fin de semana!
Seguro que ahora disfrutan muchísimo de su nueva cocina y si no mirad esta foto tan tierna.
(Fotos vía)
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