El ahorro energético es una de las principales preocupaciones de los propietarios de una vivienda, porque a la larga se traduce también en un ahorro económico. Ciertamente, los acabados que más garantías ofrecen en cuanto al aislamiento suelen ser más caros, pero se amortizan con el descenso de las primeras facturas. Una de las partes más importantes a la hora de aislar una vivienda es la colocación de ventanas, que pueden conseguir un ahorro de hasta el 70% en la factura. Si estás pensando en realizar una reforma en tu vivienda, debes conocer los mejores tipos de ventanas para aislamiento térmico del mercado.
Mejores tipos de ventanas para aislamiento térmico
A la hora de elegir una ventana, hay que tener en cuenta el lugar en que se va a encontrar, el uso de la estancia y la exposición a los efectos climatológicos como el frío, el sol o el ruido. También es necesario pensar en el tipo de material del marco, el tipo de acristalamiento, el número de cámaras y la forma de abrir y cerrar.
Ventanas de PVC
Las ventanas con marco de PVC son las que mejor aislamiento térmico ofrecen debido a su composición. Es un material que no permite que el calor se transmita entre el interior y el exterior, de modo que logra hasta un 50% más de ahorro que otros tipos de ventanas.
La principal desventaja de este material es que no es viable para aberturas muy amplias ni espacios grandes y que sufre un mayor deterioro con el paso del tiempo.
Ventanas de Aluminio
Son las más escogidas actualmente debido a su relación calidad precio, a su durabilidad, y a que permiten más opciones de personalización. Es menos aislante que el PVC, pero ofrece una alta resistencia frente al fuego y apenas necesita cuidados. Además, la aplicación de la técnica conocida como rotura de puente térmico, ha aumentado el aislamiento de este material, aunque también ha encarecido su coste.
Ventanas de Madera
Las ventanas de madera ofrecen un gran aislamiento acústico, aunque en menor medida término. Aportan una sensación mayor de calidez a la vivienda, pero tienen la desventaja que requieren un mantenimiento específico y periódico para conseguir sus mejores prestaciones.
Tipos de cristales
El acristalamiento en una ventana puede ser simple o doble, aunque es el doble el que mejores condiciones aislantes ofrece. Se compone por dos o más hojas de cristal separadas por una cámara de aire, aunque su grado de aislamiento depende también del tipo y el grosor de vidrio. La norma dice que, a mayor espesor de cristal y mayor superficie de cámara de aire, mayor será el aislamiento obtenido.
Tipos de cierres
El cierre o apertura de una ventana viene condicionado por el espacio de la vivienda, aunque también puede ser determinante a la hora de conseguir un interior mejor aislado. Entre los sistemas de cierre se encuentran: corredera, abatible, batiente, oscilo batiente, pivotante, etc. Cada una de estas formas de apertura tiene unas ventajas e inconvenientes, pero principalmente se toma la elección dependiendo del espacio y de la utilidad de la ventana.
Estos son los mejores tipos de ventanas para aislamiento térmico, aunque la decisión dependerá también de tus gustos y de las necesidades de tu vivienda. Contáctanos si quieres recibir un presupuesto personalizado para cambiar las ventanas de tu hogar, te asesoraremos en todo lo que necesites.
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