1. Por un lado tenemos la radiación directa, es decir, la incidencia de los rayos solares directamente en la vivienda.
2. Por otro, la radiación difusa, que es la que se recibe de la atmósfera y que es fruto de la propagación de la radiación solar sobre ella.
3. Por último, la conocida como radiación de albedo, que es la que se refleja en la superficie terrestre.
Así, la radiación en todas sus versiones produce sus efectos sobre la envolvente térmica de la vivienda, es decir, las ventanas, cubiertas, fachadas y vidrieras. Pero, además, también se puede transmitir por conducción al interior de la vivienda. Por esa razón, debemos tener en cuenta algunos de los peligros que puede tener el exceso de calor en casa. En concreto, vamos a tener que controlar 3 aspectos clave:
1. Los productos inflamables. Cuando hay exceso de calor dentro de casa, los productos inflamables podrían llegar a explotar y poner nuestra vida en riesgo. Lo mismo ocurre con gasolina, solventes ligeros... que tienen gases en su composición y, por tanto, también son inflamables, y que se evaporan con el calor. Es por eso que productos como los disolventes o los insecticidas se deben guardar en zonas más frescas.
2. El sistema eléctrico. Durante los meses más calurosos, aparatos como el aire acondicionado o los ventiladores suelen estar en funcionamiento durante mucho tiempo y a máxima potencia, lo que puede provocar un cortocircuito como fruto de las temperaturas elevadas. Este es uno de los accidentes más comunes en los hogares, y aunque parezcan menores, también tienen potencial de generar un incendio.
3. Problemas con las paredes, tanto exteriores como interiores. Con el calor las paredes pueden contraerse, apareciendo grietas, principalmente en las zonas más débiles. Por su parte, cuando tenemos amplias zonas de madera, como los techos de vigas, debemos tener en cuenta que es un material que se contrae con el calor. Asimismo, el exceso de calor y los cambios de humedad dentro de casa pueden dañar el suelo de madera, y eso podría hacer que las láminas se levanten.
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