Adquirieron una vivienda preciosa, en la que la zona de noche estaba muy bien distribuida pero la zona de día no encajaba con su forma de vivir así que, aunque en la obra también se incluyó renovar los dormitorios (alisar, pintar armarios, puertas, electricidad, baños), el proyecto se basó principalmente en sacarle partido a todos esos metros que conformaban la parte más social de la casa: cocina, office, salón y terraza.
ESTADO PREVIO
Como veis en el plano, a pesar de tener gran cantidad de metros útiles, todo se quedaba pequeño. Para acceder a la cocina había un gran office/distribuidor totalmente desaprovechado (en el que además estaba la nevera) y la cocina era muy pequeña y poco práctica. Desde ese mismo distribuidor se accedía a un tendedero (donde estaba la calera) que estaba totalmente en desuso. Algo similar ocurría con el salón; a pesar de sus más de 50m2 no era nada útil. Por otro lado, todo parecía oscuro y laberíntico.Finalmente la opción sobre la que trabajamos fue una mezcla de las opciones A y C ya que nuestros clientes optaron por darle sobre todo entidad al salón, descartando así por ejemplo opciones en las que la cocina se abría al salón. Sobre esa base entramos al detalle y, aunque al principio se propuso que el office se conectara con el salón a través de una cristalera, se cerró para darle intimidad. En el salón creamos 4 ambientes: zona de trabajo + área de lectura y música, zona de comedor, zona de salón donde aprovechamos que en edificio tenía salida de humos de chimenea para recuperarla y así, diseñamos un mueble de obra que incluía chimenea y leñero, y por último, la terraza de invierno.
En este proyecto hay dos cosas en las que invertimos mucho tiempo de diseño. Una de ellas es la cerrajería y la otra el despiece de los materiales elegidos tanto en cocina, como en la terraza. Sobre lo segundo hicimos planos en detalle pieza a pieza para que encajasen exactas. Muchas veces, estos pequeños detalles que pasan desapercibidos son los que hacen que un espacio sea armónico.
Las cerrajerías merecen su capítulo aparte. La terraza de invierno la cerramos con una cerrajería a medida para conseguir un espacio en el que al abrir las ventanas del exterior tuviéramos una terraza pero durante el resto de tiempo pudiera ser espacio útil del salón, Hicimos un paño de dos hojas muy grandes que se podrían esconder detrás de la parte fija de la TV para que hubiese mucha continuidad cuando están abiertas pero nos ayude a crear zonas cuando están cerradas. Esta cerrajería fue uno de los grandes retos del proyecto.
LA OBRA
Vanessa y Jose confiaron en nosotros para la realización de la obra y aun que creemos que al principio estaban un poco nerviosos como es normal poco a poco fueron disfrutando del proceso y de ver los avances. Como el presupuesto con el que contamos era limitado se tomaron decisiones como la de hacer un baño en una segunda fase o pintar puertas de paso y armarios que han quedado tan bien que quizá ni haga falta cambiarlas en el futuro. La obra en general fue muy bien porque estaba planificada al milímetro y salvo un pequeño problema que tuvimos sobre dónde colocar la caldera todo el resto fue resolvíendose sin incidencias. Como siempre, se tomaron algunas decisiones in situ como finalmente no hacer cerrajería en el tendedero de la cocina y rescatar la celosía existente. Como os comentamos, se dedicó mucho esfuerzo en los solados . Otra de las cosas con las que se tuvo mucho cuidado fue que se mantuvo el suelo original pero parte de él hubo que levantarlo de la zona de la terraza para posteriormente instalarlo en una zona en la que antes estaba la cocina y ahora el área de teletrabajo. Fue un trabajo minucioso pero quedó perfecto ¿a que no se aprecia?fotos: emmme studio
¿Os ha gustado este proyecto? Si fuera vuestra casa, ¿qué distribución habríais escogido? ¿qué es lo que más os ha gustado? ¡Esperamos vuestras opiniones!