Dom Arquitectura
Como la mayoría de construcciones de la zona, la edificación original la conformaban varios espacios organizados en torno a una era: la vivienda, el pajar, las antiguas cuadras, un almacén y un gran porche cubierto o badiu que el propietario quería remodelar para adaptarlo a su estilo de vida convirtiéndolo en una vivienda y varios pabellones de invitados.
Para ello decidió conservar el plano de distribución, manteniendo todos los volúmenes existentes, restaurando fachadas y cubiertas y redistribuyendo y renovando los más de 600 metros cuadrados de espacio interior disponible.
Dom Arquitectura
Dom Arquitectura
El Badiu
El antiguo porche se transformó y rehabilitó conservando las antiguas cerchas que soportaban la cubierta mediante un sistema de maderas y tejas en el que no hay ningún material de agarre y que avalan su profundo aire rural. Aquí se ubicó un gran comedor exterior presidido por una formidable mesa y una cocina con horno de leña y barbacoa que invitan a disfrutar de largos festines con familiares y amigos. El lateral del porche se aprovechó para crear una zona de relax con sillones desde los que descansar y disfrutar de las espléndidas vistas.
Dom Arquitectura
Dom Arquitectura
Interiores
Los espacios interiores son una sucesión de habitaciones, unas para invitados, otras para los propietarios ,donde se han conservado alguna de las paredes de piedra originales combinadas con otras en yeso y otras veces con revestimiento de madera y donde se apuesta por la combinación de materiales como el hierro para algunos elementos de soporte. Para el suelo se utiliza una combinación de pavimento de madera y azulejo hidráulico , alternando en función de la zona donde esté emplazado. Todo ello en una composición que resulta cálida y acogedora sin renunciar a su marcado carácter rural.
Pabellón de invitados I
Uno de los pabellones de invitados aprovecha la gran altura del techo y la inclinación de la cubierta para distribuirse en dos alturas diáfanas comunicadas por una escalera de hierro de diseño muy liviano. Ésta, junto con la espectacular chimenea suspendida también de hierro fundido, sirve para añadir un toque moderno e industrial en un espacio donde predominan los materiales naturales como la piedra y la madera.
Dom Arquitectura
Dom Arquitectura
Dom Arquitectura
Pabellón de invitados II
Esta otra zona de invitados, también diáfana, destaca por sus grandes ventanales con acceso al badiu y donde las privilegiadas vistas pasan a forman parte del interiorismo sin apenas esfuerzo. Como elementos decorativos destacan especialmente las puertas recuperadas de distintos tamaños colgadas sobre raíles de hierro iluminados con tiras LED en un juego de luces que resulta sumamente original.
Dom Arquitectura
Dom Arquitectura
Salón principal
Otra gran cristalera comunica el porche con este salón donde se aprecia claramente la variedad de pavimentos usados y que estéticamente sigue el patrón del resto de la casa: poco recargado, espacios limpios y diáfanos y con pocas y selectas piezas de mobiliario como la butaca y resposapiés TimeOut.
Dormitorio
Por último, os mostramos uno de los dormitorios de este gran complejo donde destaca la curiosa distribución con la cama ubicada exactamente en el centro del espacio y sobre la que pivotan el resto de estancias que le dan servicio como el lavabo y los armarios del vestidor.
Dom Arquitectura
Una rehabilitación que sabe conservar lo mejor del estilo rústico sin renunciar al presente y que a nosotros nos ha enamorado. Y a tí, ¿qué te parece esta rehabilitación? ¿Crees que sabe conservar el espíritu rústico de la zona?
Dom Arquitectura